El moañés ha firmado en Liga seis de los 18 tantos de un Celta en el que su aportación va a más; el año del regreso a Primera marcó el 32 %
26 nov 2016 . Actualizado a las 13:48 h.En el último partido de Liga del Celta, en Éibar, Eduardo Berizzo no pudo disponer del hombre del año en el vestuario, Iago Aspas. La historia se repetirá dentro de quince días en casa del Panathinaikós, y cuando los celestes no tienen a su máximo artillero, la cosa se complica. No solo lo dicen las sensaciones, sino también los números. La dependencia del equipo de los tantos del moañés ha ido en aumento desde el regreso a Primera y esta temporada uno de cada tres goles vigueses en Liga llevan su firma a pesar de que el equipo cuenta con una amplia y renombrada nómina de atacantes.
En la campaña 2012/13 el Celta retornó a Primera con un vestuario de canteranos con más ganas que veteranía y fueron principalmente los goles de Aspas los que permitieron al equipo obrar el milagro de la salvación. Ese año los tantos de Iago, la figura del equipo, supusieron el 32 % de los marcados en Liga. Este curso el porcentaje supera el 33 %.
De la mano de Paco Herrera primero, y de Abel Resino después, Iago Aspas se vistió de largo en la élite marcando una docena de goles en Liga del total de 37 del equipo. La media docena de un Augusto que todavía no había hecho el viaje al centro del campo y los cinco de Bermejo completaban el podio de artilleros de aquel Celta humilde que se aferraba con uñas y dientes a la categoría. Ese fue el año de la despedida -con vuelta- de Aspas, que no volvería a vestir de celeste en la Liga hasta el 2015.
Cuando el moañés regresó se encontró con que el cetro de líder lo manejaba un Nolito ya revestido de internacional. Pero a pesar de que el apartado goleador estaba más repartido, de que Guidetti había llegado para aportar tantos y de que Orellana se animaba de forma habitual a ver portería, Iago puso el 27,4 % de los goles en Liga. Anotó 14, dos más que el hoy futbolista del Manchester City, y el doble que Guidetti y Orellana, que marcaron siete cada uno en Liga.
Los 14 tantos de Aspas en la competición regular le permitieron convertirse en el máximo anotador del grupo, y a su golosa cuenta incluso añadió otros cuatro tantos más en la Copa del Rey, donde Guidetti mejoró su ratio al marcar cinco.
Todo pasa por Aspas
Si el Barcelona tiene «Messidependencia», el Celta tiene «Aspasdependencia». El reciente internacional con la selección española ha marcado uno de cada tres goles del equipo en la competición de Liga. Suyos son el 33 % de los tantos celestes en la competición doméstica, y además se ha animado a marcar dos en la Europa League. Tras él, el capítulo de goleadores lo ocupan un Fabián Orellana que se ha perdido más de media temporada y que ha anotado dos tantos, los mismos que Hugo Mallo y Pione Sisto. Wass, Roncaglia, Rossi, Guidetti y el Tucu Hernández se han estrenado en un apartado que hasta el momento sobrevive de la magia del moañés, que también ha dado una asistencia.
Aspas se ha convertido en el santo y seña de un Celta con el que ya ha marcado 76 goles. Los históricos 90 de Pahíño ya le quedan más cerca al que, a pesar de haber estado dos temporadas fuera, ya es el segundo máximo artillero del equipo desde el regreso a Primera. El moañés contabiliza 36 tantos entre Liga y Copa -38 con la Europa League-, tan solo superados por los 39 que Nolito marcó en sus dos años en Vigo.
Iago Aspas enciende la Navidad y pone patas arriba la Gran Vía
Iago Aspas colapsó ayer a media tarde la Gran Vía de Vigo. El delantero del Celta y de la selección española fue el encargado de encender el alumbrado navideño de El Corte Inglés, y su presencia en el acto levantó pasiones. Cientos y cientos de adultos y niños quisieron ser testigos del encendido del alumbrado del centro comercial y ver en directo, aunque sin la camiseta celeste, al atacante de Moaña. Un concierto infantil y la llegada de un Papá Noel al que el delantero le robó protagonismo sirvieron para abrir el acto, que concluyó con un espectáculo de fuegos artificiales. Nolito había sido el encargado del encendido la temporada pasada.