Los comuneros de Mos ven «cogida con alfileres» la ciudad deportiva del Celta

La Voz VIGO

MOS

RC CELTA

Advierten que los terrenos no se pueden vender y ven muy difícil el encaje legal del proyecto

05 dic 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

«Venían con la idea de comprar, pero el monte no se puede vender». Es el resumen que hace un directivo de la comunidad de montes de Tameiga (Mos) de la pretensión que les ha trasladado el Celta para levantar en terrenos del municipio la tantas veces invocada por Mouriño ciudad deportiva del club. El mismo directivo señala que la operación que pretende el presidente del Celta va a tener un difícil encaje legal, ya que los negociadores de la entidad les trasladaron que no les interesaría ni una concesión ni un alquiler.

En ese encaje, ignoran también qué contactos ha podido tener el club antes de hablar con ellos para garantizar que podrán acometer la obra que pretenden. «A veces se nos ponen pegas para concedernos permisos para talar pequeñas parcelas de unos pocos cientos de metros, ignoramos cómo podrían lograrlo para talar miles», dicen. Esperan que en una próxima reunión ?«quedaron en que nos llamarían»? les expliquen más «en serio» la propuesta.

Descolocados

En la comunidad de montes de Tameiga confiesan estar «descolocados», ya que una conversación que en teoría tendría que haber sido discreta, no solo apareció reflejada en los medios de comunicación, sino que se enteraron por estos de algunas de las pretensiones del Celta que no planteó en el encuentro, como la cantidad de hectáreas que necesita o las infraestructuras que pretende instalar. «Más que un proyecto, lo que nos presentaron fue una idea cogida con alfileres», afirman. Añade que precisamente por eso no se habló de dinero.

La idea de Carlos Mouriño pasa por adquirir algo más de medio millón de metros cuadrados en el entorno de las instalaciones deportivas del Círculo Mercantil, en los que construiría no solo un campo de fútbol y otras infraestructuras deportivas, sino también una amplia área comercial. Encajar esta última requeriría la reconversión de suelo rústico en comercial.

La construcción de la ciudad deportiva es uno de los puntos angulares del proyecto de Carlos Mouriño, conjuntamente con la explotación comercial del estadio de Balaídos, para dotar al Celta de patrimonio y de recursos económicos y desde que se planteó la posibilidad de que ese recinto saliese del municipio de Vigo (después de frustrarse la opción ya presentada de Valadares), Mos siempre fue la opción mejor situada. De hecho, en la primavera pasada la cúpula del Celta ya se había reunido con técnicos municipales para inspeccionar terrenos, revisar planos y entrar en los aspectos técnicos al mismo tiempo que la alcaldesa Nidia Arévalo se mostraba encantada en público con la posibilidad de que la ciudad deportiva céltica se construyera en terreno de su municipio.

Ahora, todo indica que Mouriño ha dado el primer paso con la Xunta para que idea se pueda plasmar, pero en este punto entran en escena las dos comunidades de montes propietarias de los terrenos deseados.