El alcalde señala que está en funciones y que no puede subir los sueldos
02 jun 2015 . Actualizado a las 05:00 h.Los trabajadores de la empresa de recogida de basuras de Ponteareas FCC iniciaron a las seis de la mañana la huelga reclamando una subida salarial de 300 euros en cuatro años. Ni el Ayuntamiento ni la empresa concesionaria realizaron ninguna maniobra de acercamiento, según se quejó el representante de la CIG, Pedro Pérez. Durante la jornada de ayer solo se recogieron unos cinco mil kilos de basura de los 17.000 que genera cada día el municipio. No obstante, los detritos permanecían dentro de los contenedores y todavía no eran visibles las consecuencias de un paro que acaba de comenzar.
Los empleados cobran 700 euros al mes y quieren llegar a los mil en cuatro años. En la anterior huelga, el Concello acabó cediendo a las pretensiones de los trabajadores y les aumentó el sueldo que, por entonces, era de unos 680 euros. Pero ahora el escenario es muy diferente, el alcalde en funciones, Salvador González Solla, señala que «en estos momentos no podemos tomar ninguna decisión que comprometa económicamente al futuro gobierno. El regidor señala que éticamente no se puede apalabrar una mejora de salarios que hipoteque a otros gestores.
Xosé Represas, considera que a la huelga se ha llegado por la dejadez del gobierno municipal a la hora de presionar a la empresa para que mejore las condiciones de los empleados. Represas señala que si llega al gobierno se sentará a negociar con empresa y trabajadores. EU se ha solidarizado con los trabajadores.
El gobierno municipal ha establecido unos servicios mínimos formados por seis de los 20 empleados. La CIG considera abusivos esos servicios y los ha recurrido. La recogida de basuras en las calles se hará tres días a la semana con un camión de carga lateral y otro más pequeño que recogerá los restos que se vierten alrededor de los contenedores.
«Parecenos excesivos dous camións», señala Pedro Pérez. Indica que el gobierno municipal ha exigido el barrido de las calles y para el sindicato que protagoniza la huelga «non é un servizo fundamental».
La huelga que acaba de empezar amenaza con empañar las fiestas del Corpus que están declaradas de interés turístico internacional. En esta ocasión el pueblo de juega el prestigio de su imagen internacional puesto que está previsto la llegada de una televisión pública de Japón que viene acompañado a una delegación de Tokio, que mostrará el próximo fin de semana su arte floral. Pérez indicó que piden que todos los grupos municipales se impliquen en la resolución del conflicto. «Agardamos que canto ates nos chamen. Nosas propostas son asumibles. Pensamos que é una irresponsabilidade deixar que medre o conflicto».
La representante de la plantilla, Beatriz González, señala que «están jugando con nosotros. Tienen un tira y afloja y nosotros estamos en medio». González reside en Salvaterra y tiene que desplazarse a trabajar a Ponteareas por 700 euros al mes. «Pago 450 de hipoteca y tengo dos hijos», señala.