Redondela quiere abrir ya el centro de día de Cesantes, construido hace cuatro años

El Concello de Redondela confía en que el centro de día de Cesantes pueda abrirse «inmediatamente» a ser posible antes de fin de año. Ya toca. Se empezó a hablar de él en el 2007 cuando todavía gobernaba el bipartito en la Xunta, pero la licencia de obra a Construcciones Conde no se concedió hasta noviembre del 2009, con Xaime Rei como alcalde. Las obras comenzaron en el 2010 y el recinto se terminó en el 2012 con capacidad para atender a 51 usuarios, 21 en plazas de carácter residencial y 30 con horario diurno. Desde que se acabó el edificio, hace cuatro años, el inmueble se fue deteriorando hasta hace unos meses en que se le hizo un lavado de cara y puesta al día.

La idea inicial era que acogiese a personas en régimen de residencia pero ha habido que hacer recortes y de momento se comenzará solo con 20 usuarios. En un futuro se incorporarán otros 20 usuarios más como máximo, «en función de la demanda que vaya surgiendo», dice la teniente de alcalde María del Carmen Amoedo.

El edificio se ubica en un solar de 2.984 metros frente al puerto de Cesantes, y tiene una superficie construida de más de 1.500 metros, distribuidos sótano y dos plantas. El coste inicial de 1,7 millones aumentó a 1,9.

La apertura va a ser posible porque el Concello ha consignado una partida para sufragar los gastos de los usuarios, pondrá diez euros por cada uno de ellos. La aportación municipal se basa en un convenio marco suscrito en su día por la Federación Galega de Municipios e Provincias por el que los pueblos y ciudades se comprometían al copago de los centros de día.

Como no hay presupuestos aprobados, el gobierno local del PP necesitó votos de otros grupos y el BNG apoyó esta medida. Redondela Pode se abstuvo. La Agrupación de Electores de Redondela y el PSOE votaron en contra de esta cofinanciación de las plazas. La portavoz del PP, María del Carmen Amoedo, piensa que «el PSOE se ha hincado de rodillas ante AER, que le marca las directrices».

La diputada provincial socialista, Digna Rivas, criticó el año pasado la tardanza en abrir. «No son capaces de gestionar este tema y garantizar una dotación de vital importancia para la villa», señaló. «Seguiremos exigiendo su apertura», advirtió

En febrero del año 2014 la portavoz de política social del grupo socialista, Carmen Gallego Calvar, defendió en el Parlamento una proposición no de ley por la que se instaba a la Xunta a poner en marcha, en un plazo máximo de tres meses, el centro. Denunció las «constantes escusas da Consellería de Traballo» para retrasar la entrada en funcionamiento. La parlamentaria socialista defendió que la gestión el centro fuese pública. «Non estamos dispostos a que a xestión pase a mans privadas», señaló Gallego. La diputada de Vilaboa consideró la decisión de mantener cerrado el centro de Cesantes cómo «un ejemplo de las políticas sociales de Feijoo».

La entonces secretaria de Políticas Sociales de la Xunta, Coro Piñeiro, prometió que iba a estar funcionando en la primavera del año pasado. Tampoco se cumplió el plazo por falta de presupuestos.

De la gestión pública, la Xunta no quiso saber nada y se la adjudicó a Cogami, que empleará a algunos discapacitados, según señala la teniente de alcalde. En los últimos meses el gobierno local apremió a Cogami para que pusiese en marcha el centro.

1.900.000 €

Coste

El edificio tiene 1.500 metros cuadrados construidos en una parcela de casi 3.000.

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