Zona Franca llegará al 2017 sin presupuestos por primera vez en medio siglo de historia

Juan Manuel Fuentes Galán
juanma fuentes VIGO / LA VOZ

VIGO CIUDAD

F.G.

Caballero rechaza tramitarlos si no se retira el pago a la Xunta de dos edificios de la ETEA destinados al Campus do Mar

20 dic 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Salvo que Abel Caballero, presidente de Zona Franca, dé marcha atrás, el organismo estatal empezará el 2017 sin presupuestos por primera vez desde que se creo en los años 60. El motivo del conflicto es una crisis política entre la delegada del Estado en el consorcio, la popular Teresa Pedrosa, y el alcalde de Vigo, que como presidente tiene en sus manos la convocatoria del pleno para dar vía libre a las cuentas.

El enfrentamiento entre ambos políticos se gestó en el 2015 y se agudizó el pasado verano, cuando los vocales socialistas rechazaron la aprobación del presupuesto. Desde entonces el regidor ha rechazado convocar un nuevo pleno si antes la delegada del Estado no retira una modificación anexa de las cuentas del 2016. Este expediente incluye el pago de cinco millones de euros a la Xunta para hacerse con la titularidad de dos edificios de la antigua ETEA que quiere ceder a la Universidad para poner en marcha el Campus do Mar.

Hasta ahora Caballero presionaba a Zona Franca, pero mantenía que antes del 2017 tramitaría las cuentas para no complicar su inclusión en los Presupuestos Generales del Estado. Ayer, sin embargo, descartó ese límite que se había autoimpuesto.

No está de acuerdo con que la delegada de Zona Franca haya elaborado el presupuesto del 2017 con un anexo modificando el de este año. «Que los mande por separado y tramitaré el del 2017. Y ya veré si tramito, o no, el otro», afirmó ayer. Con ello busca evitar que los edificios destinados al Campus do Mar sean cedidos por Zona Franca a la Universidad tras pagarle 5 millones de euros a la Xunta. «El consorcio no tiene por que hacerse cargo de gastos autonómicos. Después esos 5 millones que quiere pagar los invertirá la Xunta en A Coruña, por ejemplo», aventuró.

Compensación

Caballero es consciente de que su veto irrita a la Universidad, cuyo rector se ha quejado en varias ocasiones. Incluso alertó de que el retraso puede poner en riesgo ayudas europeas para crear el Campus do Mar.

Por este motivo, ayer ofreció una ayuda de cinco millones de euros con destino a la Universidad si los edificios del Campus do Mar los cede directamente la Xunta. «En ese caso llevaré una propuesta para que cinco millones municipales se destinen a impulsar la labor investigadora de la Universidad», se comprometió ante los periodistas.

Una vez que los presupuestos no fueron aprobados en julio, la fecha habitual, ni tampoco en septiembre, ya que no existía Gobierno en Madrid, lo que no aclara Caballero es hasta cuándo mantendrá su veto. De momento dispone de margen ya que todavía no hay fecha para la presentación de los presupuestos estatales. Cuando llegue esa fecha la crisis de Zona Franca puede llegar al límite.

De momento, el alcalde ironizó ayer sobre un hipotético malestar del ministro de Hacienda con la situación generada en Vigo. «Sospecho que [Teresa Pedrosa] tiene enfadado a Montoro, que es precisamente la persona que la puede cesar». Insistió en que «está obligada a presentar las cuentas del 2017, pero no lo quiere hacer».

El retraso en su aprobación aparca proyectos como la construcción de la ciudad del transporte y en total inversiones por importe de casi 50 millones de euros. En julio Caballero pudo vetar su aprobación al tener una mayoría coyuntural en el pleno de Zona Franca. Actualmente ya no es así debido al reajuste que inmediatamente llevó a cabo Pedrosa. Por ello, el alcalde sabe que en el momento en que se celebre la sesión los vocales nombrados por el PP son suficientes para aprobarlos.

El Concello despeja los alrededores de la Panificadora para su recuperación

El Concello ha incluido en sus presupuestos del año próximo 2,5 millones destinados al proyecto para recuperar la Panificadora. A la espera de que se aprueben y ejecuten, el gobierno local va dando pasos para facilitar la rehabilitación urbanística de la antigua factoría. Para ello ha iniciado la expropiación de parcelas y viejas viviendas situadas en sus inmediaciones. Ayer mismo, varios operarios con maquinaria procedían a derribar una vieja casa con la que se ha hecho el Concello previo pago de 90.000 euros.

Zona Franca también incluye en sus cuentas, bloqueadas por el momento, una partida de 2,5 millones de euros, idéntica a la del Concello. A estos 5 millones se suma el concurso en marcha para proponer ideas para la recuperación urbanística de la parcela.