Cuatro detenidas por montar una red de prostitución de lujo en chalés de Vigo y Pontevedra

E. V. Pita, L. Penide VIGO

VIGO CIUDAD

Policía Nacional de Vigo

Operaban bajo el nombre de LaSuitte y eran buscadas en Ibiza. Tenían una casa en la avenida del aeropuerto, en el barrio vigués de O Calvario, y otra en A Caeira, en Poio.

11 jun 2021 . Actualizado a las 01:37 h.

La Policía Nacional de Vigo ha desmantelado un clan familiar que montó una red de prostitución de lujo con extranjeras en dos chalés de Vigo y Poio. La red se promocionaba con el nombre de LaSuitte. Los registros, bajo la dirección del Juzgado de Instrucción número 7 de Vigo, se llevaron a cabo el miércoles y la operación policial se saldó con cuatro detenidas, tres de ellas del mismo clan. Varias eran buscadas por hechos similares en Ibiza.

El chalé de Vigo está ubicado en la avenida del aeropuerto, en una urbanización de adosados situados cerca del barrio de O Calvario. 

La casa de Pontevedra está situada en el municipio de Poio, «al parecer, en la zona de A Caeira», según indicaron fuentes cercanas al caso, en un área chalés y urbanizaciones con vistas a la ría y a un paso de Pontevedra.

Todos los pisos eran regentados por las cuatro mujeres. La jefa era brasileña y las otras tres colombianas. Una de ellas tenía todas las casas a su nombre. Los agentes continúan la investigación para averiguar si pertenecían a una organización más extensa en la provincia de Pontevedra o del resto de Galicia.

La red funcionaba desde enero del 2020, pero la Policía no localizó el lugar hasta marzo del 2021. Al frente de los chalés estaba una brasileña que, bajo el amparo de cuatro sociedades a su nombre, se dedicaba supuestamente a la explotación de mujeres de diferentes nacionalidades que trabajan en la prostitución.

A las implicadas les atribuyen los delitos de organización criminal, tráfico de drogas y explotación sexual. Las cuatro detenidas pasaron el miércoles por el juzgado de guardia y quedaron libres con cargos.

El número de víctimas no se puede determinar porque las viviendas tenían mucho movimiento de mujeres, tanto en los días laborales como en los fines de semana. Había unos días con diez mujeres y otros con veinte. Procedían tanto de Latinoamérica como de Europa del Este. Algunas tenían permiso de residencia y otras eran ilegales.

Policía Nacional de Vigo

El clan controlaba, supervisaba y explotaba el ejercicio de la prostitución ajena, así como la distribución de sustancias estupefacientes en el interior de los chalés durante el ejercicio de las prácticas sexuales.

Los implicados ostentaban un alto nivel de vida, y se movían en coches de alta gama. Se les requisaron 3.000 euros en efectivo y tarjetas de pago TPV. Los tiques de los clientes revelan los altos precios que abonaban.