Los okupas entran en la antigua cárcel de Vigo

alejandro martínez VIGO / LA VOZ

VIGO CIUDAD

El viejo recinto penitenciario, que ocupa unos 7.000 metros cuadrados en la avenida de Madrid, permanece abandonado desde hace 17 años. Los vecinos denuncian que es un lugar desaprovechado

30 sep 2023 . Actualizado a las 05:00 h.

La antigua cárcel de Vigo tiene un preso voluntario. Se trata de una persona sin hogar que ha encontrado un techo en este espacio abandonado. Los reclusos del Centro de Inserción Social (CIS) lo han visto colarse dentro de las antiguas instalaciones penitenciarias y así lo han comunicado a los responsables del módulo. Al parecer, se trata de una persona de origen africano que sale por el día a buscarse la vida y acude a pernoctar ahí, colándose a través del perímetro que rodea la antigua prisión, aprovechándose de la falta de vigilancia. El okupa no goza en el interior del viejo presidio ni de agua ni de luz. Las condiciones en las que habita en las antiguas dependencias de la avenida de Madrid son pésimas.

Trabajadores del CIS Carmen Avendaño sospechan que el okupa accede por la zona que no colinda con ellos. En cualquier caso, debe escalar por el muro perimetral o las dos verjas metálicas que se encuentran en la entrada de la avenida de Madrid.

El antiguo penal no se encuentra en condiciones para ser habitado debido a la falta de mantenimiento desde que se dejó de utilizar hace 17 años. Desde que se cerraron, los 7.000 metros de las celdas y casas de los funcionarios de prisiones no ha vuelto a tener ningún tipo de uso. La humedad ha ido deteriorando poco a poco las instalaciones y la maleza ha crecido por todas partes. Hace años, el Concello llegó a avisar al Ministerio del Interior con multas por no limpiar toda la vegetación. Los vecinos se quejaron al Ayuntamiento y un inspector municipal reconoció la existencia de un «gran riesgo» de incendio.

El extinto presidio también ha causado molestias en el colegio Lope de Vega, que se encuentra pegado a la parte trasera. El personal del centro se ha visto obligado a cortar las hierbas y ramas que penetraban en sus instalaciones.

Son un total de 7.000 metros cuadrados que albergaban los módulos de presos y las viviendas de los funcionarios. El Ministerio del Interior no baraja en la actualidad ningún proyecto para recuperar el complejo. Hace más de una década llegó a asignarse un presupuesto de 10,5 millones de euros para ampliar el centro de inserción social, con el que se pretendía acabar con la saturación de la cárcel de A Lama. Sin embargo, la crisis económica hizo que el Gobierno diera carpetazo a esta iniciativa. Hoy en día la ampliación sería aún más necesaria.

La agrupación sindical Tu Abandono Me Puede Matar denuncia que las instalaciones carecen de espacio para llevar a cabo actividades ocupacionales. Además, se encuentran en mal estado, por lo que también haría falta una reforma. Por ejemplo, las cañerías se encuentran ya deterioradas y los internos utilizan agua con óxido, tanto para beber como para ducharse, según denuncian fuentes sindicales.

M.MORALEJO

También apuntan que, en lugar de perder el tiempo en el patio o en una sala de televisión, los reclusos podrían disponer de aulas para poder realizar cursos de capacitación. Además el número de condenados es mayor que hace una década y se producen a menudo fricciones porque no tienen unos horarios homogéneos y suele perturbarse su derecho al descanso, entre los que entran de madrugada y los que deben levantarse temprano para ir a trabajar. Actualmente, el CIS de Vigo cuenta con 170 reclusos cumpliendo condena en régimen de tercer grado o segundo ampliado, aunque solo un centenar de ellos pernoctan en estas instalaciones.

Los vecinos piden que se convierta en un lugar de esparcimiento  

Los vecinos llevan años denunciando el mal estado de la antigua cárcel de Vigo. El presidente de la asociación de vecinos de Sárdoma, Eduardo Alonso, señala que el estado es «deplorable». Las personas que viven en el entorno de la antigua penitenciaria reclaman su desafectación para que pueda utilizarse como equipamiento al servicio de la ciudadanía. El dirigente vecinal apuesta por convertir la antigua cárcel en un lugar de esparcimiento para los vecinos.

«En Sárdoma tenemos dos pabellones y uno de ellos es inutilizable para la gente de la parroquia porque está copado por gente de fuera. Los deportes que quiere el Concello, no los demanda la parroquia», afirma. Los vecinos solicitan unas instalaciones para practicar el fútbol sala. La semana que viene tienen previsto dos entrenamientos que tendrán que realizar en algún recinto privado fuera de la parroquia, en el colegio Santiago Apóstol, «porque no tenemos pistas en ninguno de los pabellones».

Los vecinos no entienden cómo puede haber un espacio tan desaprovechado con todas las carencias de locales existentes en la parroquia. Otra de sus demandas, por ejemplo, es la creación de un auditorio para poder acoger eventos, puesto que el que tienen en la actualidad es demasiado pequeño y carece de una buena acústica. «Se podían hacer muchas cosas allí porque no está mal ubicado», señala el presidente de la asociación de vecinos de Sárdoma, que organiza actividades culturales y deportivas.