Las organizaciones han considerado que el tercer grado penitenciario, que permite a las condenadas sólo tener que pernoctar en el centro penitenciario y disfrutar los fines de semana fuera, es «insuficiente» y «no es una solución admisible por su condición de trabajadoras»
Las sindicalistas ingresaron en prisión el pasado 10 de julio para cumplir una pena individual de tres años y medio de cárcel por coacciones al propietario de una pastelería de Gijón
Los socialistas mantienen pactos que afianzan la presidencia del lendakari Imanol Pradales, pero los nacionalistas vascos endurecen su posición para negociar con el Gobierno