Volver
';

Desayuno de domingo con... Marcos Chicot: «Quizá los superdotados decimos más tonterías que los demás»

Madrid, 1971. Soy padre y, además, escritor. Con 'El asesinato de Aristóteles' (Planeta) cierro el ciclo al que he dedicado doce años: recrear el pensamiento de los grandes filósofos griegos.

Viernes, 26 de Diciembre 2025, 10:30h

Tiempo de lectura: 3 min

XLSemanal. ¡Qué fijación con asesinar a filósofos! Primero a Pitágoras, luego siguió con Sócrates, Platón y Aristóteles. A alguno lo asesinaron; a todos no.

Marcos Chicot. [Ríe]. Lo que quiero es resucitarlos, que falta hace.

XL. Vamos por partes. Usted era un brillante economista que dejó el mundo de la empresa para estudiar Psicología y, a raíz de tener una hija con síndrome de Down, decidió convertirse en escritor.

M.C. Mi vida dio un giro al dejar la empresa y empezar a estudiar Psicología Clínica porque quería ayudar a los demás. Después, decidí dejarlo todo para escribir la mejor novela que fuera capaz y apuntalar el futuro de mi hija.

«Veo muy mal que alguien critique un tipo de novela porque está criticando a un tipo de lector»

XL. Entonces se encierra en casa, escribe El asesinato de Pitágoras y lo presenta al Premio Planeta, pero no lo gana.

M.C. Lo publiqué en Internet por mi cuenta y fue el libro en lengua española más vendido del mundo en 2013.

XL. ¡Olé! [Risas].

M.C. Imagina: tres años sin trabajo ni ingresos y, de repente, best seller mundial. Después escribí El asesinato de Sócrates, que quedó segundo en el Planeta. 

XL. Sus libros son rigurosos en la historia y muy entretenidos en la novela.

M.C. Tardé cuatro años en escribir El asesinato de Platón y cinco el de Aristóteles. Para este, me documenté dos años, leí más de doscientos libros y, solo a partir del tercer año, empecé el texto.

XL. ¿No puede hacer dos cosas a la vez?

M.C. Soy un poco de extremos, sí. O todo o nada [ríe].

XL. ¿Ha leído los últimos premios Planeta de Juan del Val y Sonsoles Ónega?

M.C. No. Mientras escribo, solo leo documentación histórica. Pero defiendo todo tipo de literatura porque hay todo tipo de lectores. Veo muy mal que alguien critique un tipo de novela porque está criticando a un tipo de lector.

XL. Usted es muy listo y pertenece al selecto club de superdotados (Mensa), ¿de qué hablan en esas reuniones?

M.C. En el fondo es un club social donde se habla de todo tipo de temas, con el fin último de ayudar a la humanidad.

XL. ¿Ni se habla de mujeres ni se dicen tonterías?

M.C. ¡Ja, ja, ja! Como en cualquier reunión se habla de mujeres, fútbol, cerveza y, a veces, de física teórica o ajedrez. Y, como en todas partes, se dicen bastantes tonterías. Quizá los superdotados decimos más que los demás: una mente hiperactiva comete más aciertos y más errores.

Balanceado

«A diario, un bol con leche desnatada, cacao en polvo, avena integral, cereales de salvado de trigo, nueces y arándanos deshidratados. El ‘finde’ hago con mis hijos una montaña de tortitas con nata, chocolate y sirope de caramelo».