El Concello de Viveiro denunció ayer en la Comisaría de Policía que personas desconocidas accedieron a la caseta que tiene de almacén el cementerio de Altamira, y además de los daños causados para acceder se llevaron una herramienta y dinero. En concreto una radial marca Bosch Profesional, de la que se desconoce el valor, y unos cuarenta euros que había en un bote dentro de un archivador.
La denuncia fue cursada por el enterrador, Bernardo Fernández Cajete, acompañado del concejal de Obras y Servicios Públicos de Viveiro, Bernardo Fraga. Sospechan que el robo ocurrió entre las 19 horas del día 7 y las 9 horas del día 8. Según la denuncia, la apertura del cementerio la realizan operarios del Grumir. El responsable del cementerio de Viveiro recibió el día 8 la llamada de su hijo comunicándole que la puerta de acceso a la caseta, donde guardan herramientas y hay una mesa con papeles y efectos de oficina y archivo, estaba abierta, sin poder precisar si faltaba algo. Es a la vuelta cuando se percatan del robo.