Ñeti, uno de los mejores proas oceánicos del mundo: «Mis inicios con la vela fueron en Ribadeo»

Llevando la terminología de la náutica al automovilismo, se podría decir que La Volvo Ocean Race (la vuelta al mundo a vela) sería un rali, con largas etapas, mientras que la Copa América sería la Formula Uno, con carreras más cortas. Con las regatas olímpicas, son las tres competiciones más importantes del mundo de vela. Antonio Cuervas-Mons, «Ñeti», (Santander, 21 de diciembre de 1981), cuenta en su dilatado currículo con la participación en cuatro Volvo Ocean Race (en la última edición como proa y capitán del Mapfre) y en tres regatas Sídney-Hobart, considerada la travesía oceánica corta más dura del mundo, con un recorrido de 628 millas náuticas (1.164 km) entre el puerto australiano y la capital de Tasmania, que ganó en dos ocasiones.

Semejante currículo y prestigio no impide que Ñeti sea una persona absolutamente asequible y afable. «É moi bo chaval», le define alguno de sus conocidos en Ribadeo. Porque Ñeti tiene una estrecha vinculación con Ribadeo, donde dio sus primeros pasos en el mundo de la vela. Sus padres tienen en A Devesa una casa, a la que acuden periódicamente. Y Ñeti también, dejándose ver por Ribadeo para reencontrarse con sus amigos, como ocurrió esta pasada Navidad.

«Mi abuelo, que es de Oviedo, veraneó toda la vida en A Devesa. Él me introdujo en la náutica y mis primeros recuerdos están en Ribadeo, en un bote de vela latina. Después ya fue en Santander donde comencé a practicar todo el año», recuerda.

-Usted está considerado uno de los mejores proas oceánicos del mundo.

-Bueno... llevo diez años en navegación oceánica en los que he tenido la suerte de participar en las regatas más importantes del mundo y con gente muy buena. Así es sencillo hacer currículo.

-Y un clásico en la vuelta al mundo. ¿Lo veremos también algún día en una Copa América?

-Son regatas muy diferentes. En la Volvo Ocean Race entran más factores, por ser una prueba con etapas muy largas, aspectos incluso relacionados con la propia supervivencia. Es la vela en estado puro, 24 horas al día, con muchos días hasta la llegada. Y tal y como ha evolucionado la Copa América, un perfil de regatista como el mío, que soy proa, ese puesto en los barcos de Copa América ha desaparecido. Mi estilo es más técnico, no se ajusta al que tienen los regatistas de la Copa América, que es más físico.

-¿Cómo se le presenta 2019?

-Lo tengo bastante ocupado. La vuelta al mundo es cada tres años, por lo que toca en 2021, y entre vuelta al mundo y vuelta al mundo navego con otro tipo de barcos, casi todos de armadores privados que participan en regatas por todo el mundo y que tiene barcos tan complejos que necesitan una tripulación especializada. Este año, la verdad, es que ya tengo bastante lío. La Volvo es un escaparate muy bueno para los regatistas y en mi caso, al haber hecho cuatro, me conoce bastante gente y me llaman para navegar con ellos. Hay demanda de tripulantes profesionales.

-¿Una profesión, la suya, en la que nunca se deja de aprender?

-Nunca, porque la náutica evoluciona constantemente y la tecnología avanza mucho. En el equipo de la vuelta al mundo, ya hace muchos años que utilizábamos técnicas de ultrasonidos para saber si el carbono o el sándwich del barco tenía burbujas de aire. Esta técnica, que nosotros aplicábamos ya hace tiempo, la asimiló Ferrari. En muchos aspectos la náutica está más avanzada que la Formula Uno.

-¿Se ve ganando la Volvo Ocean Race?

-El año pasado (con el equipo del Mapfre) lo tuvimos muy cerca. Hasta la última etapa, las últimas millas, lo tuvimos ahí. Pero ganar la vuelta al mundo es muy complicado. No basta con navegar bien, porque influyen muchos factores, como el tiempo. Fue una lástima, pero estamos muy contentos porque creo que fue el mejor proyecto de vuelta al mundo en el que he estado. Navegamos muy bien, con errores, como todos, y por mala suerte no ganamos con holgura. Fue una experiencia más de la que aprender, de la que nos quedamos con lo bueno y con haber hecho un segundo puesto, que es el mejor que ha logrado España en una vuelta al mundo. La lástima fue perderla el último día.

-La próxima Volvo Ocean Race será en 2021. ¿Cuándo se comienza a preparar?

-Ya. La última fue con todos los barcos iguales, con lo que el trabajo previo se reducía mucho. Sí que estuvimos unos meses navegando, pero la próxima edición volverá a regirse por unas normas genéricas y dentro de ellas cada equipo diseñará su barco, a modo de como se hace en la Fórmula Uno. De modo que cuanto antes empieces a trabajar más ventaja tendrás sobre los rivales. Ya se está en ello, primero encontrando espónsor, formando equipo, construyendo el barco y, luego, empezando a navegar lo antes posible. Es un proceso largo.

-¿Estará usted?

-Sí. Ojalá.

-Por cierto... ¿algún remedio para los que se marean en el mar?

-Es difícil. Hay quienes navegan conmigo y lo pasan muy mal, lo que pasa es que aguantan y no se les nota en la cara, pero lo pasan falta. Yo me he mareado dos veces: una vez que se rompió el motor y con la cabeza inclinada y respirando el combustible me sentí falta, y otra saliendo de Nueva Zelanda, cuando me sentó mal algo que había comido. Hay trucos como comer pan, o parches... pero no hay remedio, cuando te toca lo pasas fatal.

currículo

Volvo Ocean Race. Regata 2008-2009, con el barco Telefónica Negro, quedó sexto. Regata 2011-2012, con el Telefónica, quedó cuarto. Regata 2014-2015, con el Mapfre, volvió a ser cuarto. Regata 2017-2018, de nuevo con el Mapfre, quedó en segunda posición, la mejor clasificación de España en la vuelta al mundo a vela.

Rolex Sydney-Hobart. Ha participado en tres ediciones, en 2016, 2017 y 2018, ganando las dos primeras.

Circuito Med Cup. Compitió cuatro temporadas a bordo del español «Bribón».

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