
La «reina roja» es una saga de novelas de Gómez Jurado con mucho éxito; también da o dio nombre a una serie de televisión. Años atrás calificamos de «reina roja» a María Loureiro por ser la primera mujer y de izquierda en alcanzar la alcaldía de Viveiro con mayoría. Nada que ver con la intrigante Antonia Scott de Jurado; la gran arma de María Loureiro era y ha sido, creo, su naturalidad y su sencillez, su sonrisa, el no tener grandes pretensiones. Siempre dijo que para ella lo más importante era mejorar el día a día de los vecinos (en realidad también supone un reto importante). Eso le dio dos legislaturas con mayoría, pero el tiempo desgasta y las circunstancias van cambiando y ya no fue suficiente. Hace falta aspirar siempre a más, también a grandes proyectos aunque no estén en tus manos; al menos pelear por ellos.
No fueron años fáciles, recordemos que en medio sufrimos una pandemia y creo, honestamente, que Viveiro gestionó bastante bien las ayudas y el trabajo social de refuerzo y se adelantó con iniciativas propias a otros concellos; también se trabajó con bastante acierto en turismo, pero cada cual juzgará según considere. De momento María Loureiro va a seguir en la oposición, donde nunca ha estado; probablemente acabe en un puesto de la Diputación, pues el PSOE de A Mariña tiene bastante peso político en la provincia de Lugo. (De hecho el propio José Tomé, presidente de la Diputación, vino a testimoniarle su apoyo en el pleno de la moción de censura este pasado viernes).
Se ha abierto una nueva etapa en el gobierno de Viveiro con Mariña Gueimunde y su equipo al frente. La nueva alcaldesa tiene otro perfil completamente distinto, carácter y una personalidad más marcada. Ni mejor ni peor, distinto. Y viene con ganas. Los ciclos en política son una constante como las estaciones del año, aunque no estén tan definidos en el tiempo, pero existen: la política también va por ciclos. Ojalá este ciclo que ahora afronta otra mujer, Mariña Gueimunde, sea favorable para Viveiro porque Viveiro necesita un empuje (por parte de todas las administraciones) después de quedar aislado claramente con las infraestructuras esenciales.