Alcoa anuncia que ha cerrado un acuerdo con Ignis EQT para producir aluminio en San Cibrao

A MARIÑA

Álvaro Dorado, de Alcoa, y Antonio Sieira, de Ignis, en el centro de la imagen en una reunión en Madrid
Álvaro Dorado, de Alcoa, y Antonio Sieira, de Ignis, en el centro de la imagen en una reunión en Madrid David Lopez Villalta

La multinacional comunica una alianza con la energética, que participará al 25 % del complejo, y afirma que cumplirá «con la obligación del arranque» en el día que estaba fijado comenzar el reinicio de la actividad

02 abr 2025 . Actualizado a las 09:29 h.

Alcoa ha anunciado este martes que ha cerrado un acuerdo definitivo de empresa conjunta (joint venture) con la energética Ignis Equity Holdings para «respaldar la continuación del funcionamiento» del complejo de San Cibrao. La multinacional comunica esta alianza en el mismo día, 1 de abril, en el que según el pacto firmado con los trabajadores para un cese temporal de la planta de aluminio, debiera comenzar, de forma paulatina, el arranque de las cubas de electrolisis, a fin de tener las 512 operativas en octubre.

La compañía señala que la joint venture «tiene vigencia a partir del 31 de marzo del 2025. Alcoa tendrá una participación del 75 % y continuará como operador gerente e Ignis EQT será propietaria de una participación del 25 por ciento», señala la multinacional, que agrega que la aluminera «ha aportado 75 millones de euros» y la energética 25 «para formar la empresa conjunta y financiar las operaciones».

«Además, Alcoa podría financiar hasta cien millones de euros según lo que necesiten las operaciones, con una posición prioritaria en rentabilidades de efectivo futuras. Si se requiere financiación adicional, se necesita el acuerdo de ambos socios y sería compartida en un 75 % por Alcoa y en un 25 % por Ignis EQT», concreta la multinacional en un comunicado.

«Este acuerdo de empresa permite el rearranque previsto de la planta de aluminio de San Cibrao en el 2025», apunta la compañía. La multinacional enfatiza en su comunicado que reiniciar la actividad es una «obligación» contraída con la plantilla.

Alcoa hace hincapié en su comunicado en que «en el 2024, la planta de aluminio de San Cibrao registró unas pérdidas netas (antes de impuestos) de aproximadamente 50 millones de dólares, y un flujo de caja operativo negativo de aproximadamente 60 millones de dólares».

«Los desembolsos netos de efectivo en el 2024 cubrieron la remuneración de los empleados y los costes de mantenimiento, mientras la planta estuvo en total recorte de producción, con volúmenes de producción limitados en la fundición para cumplir con los compromisos adquiridos con los clientes», añade.

«Basándose en precios recientes, esperamos registrar una pérdida neta para la planta de aluminio de entre 80 y 100 millones de dólares, o de 0,31 a 0,39 dólares por acción ordinaria en el 2025. Se espera que el efectivo asociado utilizado en las operaciones se aproxime a entre los 90 y los 110 millones de dólares», apunta.

En cuanto a las inversiones de capital necesarias para facilitar el arranque de la planta de aluminio, que permanece parada desde enero del 2022 y que cuenta actualmente con 32 cubas operativas, Alcoa asegura que «se aproximan a los diez millones de dólares, y están incluidos en la guía de gastos de capital de búsqueda de rentabilidad total y de sostenimiento de la empresa, sin cambios, de aproximadamente 75 millones y 625 millones de dólares, respectivamente».

Alcoa anunció en octubre del 2024 un preacuerdo con Ignis, cuya efectividad condicionó a una serie de exigencias a comité y Administraciones. A los sindicatos les reclamó aceptar el aplazamiento hasta el 2028 del horno de cocción de ánodos, la inversión más importante de las contenidas en el pacto entre patronal y plantilla, y que permita financiar las operaciones diarias con el dinero reservado para dicha obra. A las Administraciones, apoyo económico y en proyectos clave como la ampliación de la balsa de lodos rojos y la aprobación de parques eólicos vinculados al sitio industrial.

Xunta y Gobierno mostraron su apoyo al plan de la multinacional en un memorando de entendimiento (MoU), mientras que el comité rechazó posponer el horno y financiar el arranque con el dinero previsto para la obra.

Los sindicatos convocaron para mañana, miércoles, una asamblea para decidir la hoja a seguir después de que no se haya retomado el arranque este primero de abril, tal y como estaba fijado en el contrato con los trabajadores.

La conselleira de Economía e Industria, María Jesús Lorenzana, ha celebrado la alianza entre Alcoa e Ignis EQT como una «buena noticia».

A su juicio, el acuerdo refuerza a Alcoa tanto desde el punto de vista económico como en el ámbito tecnológico «ya que la experiencia en el sector energético que tiene Ignis es relevante y va a aportar a la fábrica de San Cibrao valor añadido». La inversión comprometida «permitirá seguir trabajando y apostando por la planta lucense», ha añadido.

La conselleira de Economía e Industria subrayó que, a partir de este momento, resulta fundamental el arranque de las cubas y el inicio de los trabajos para alcanzar la cuota 104 de la balsa de lodos rojos que fue autorizada por la Xunta de Galicia, además de las inversiones.

Tras el anuncio de la constitución de una empresa conjunta por parte de Alcoa y de Ignis para mantener las operaciones en el complejo industrial de San Cibrao, el presidente del comité de empresa, José Antonio Zan, aseguró que la «viabilidad» de la planta solo la garantizan «las inversiones» y «cumplir lo que está firmado» por parte de la compañía.

«A nosotros al final, que sea una empresa u otra, nos da igual. Tenemos un acuerdo de viabilidad, que es lo que tenemos que buscar, la viabilidad de la planta. Un futuro, tanto para la comarca como para los trabajadores de la factoría», dijo Zan.

«Eso nos lo dan las inversiones y cumplir lo que está firmado» en el acuerdo de viabilidad que formalizaron en su día los trabajadores y la multinacional para apagar las cubas de electrolisis a cambio de inversiones millonarias en la modernización de la fábrica de aluminio.

«Realmente, la responsabilidad de con quién se asocia y qué está buscando con esa asociación es de Alcoa y de sus directivos», zanjó.