Vecinos y Policía Nacional impiden la okupación de otra casa en Covas, Viveiro

Lucía Rey
Lucía Rey VIVEIRO / LA VOZ

A MARIÑA

El intento de okupación tuvo lugar en una casa del barrio de Nogarido, en Covas (Viveiro), que lleva deshabitada alrededor de dos años
El intento de okupación tuvo lugar en una casa del barrio de Nogarido, en Covas (Viveiro), que lleva deshabitada alrededor de dos años PEPA LOSADA

El hijo de la propietaria de la vivienda agradece la colaboración vecinal y policial: «Pensas que nunca che vai pasar algo así ata que che pasa» 

16 oct 2025 . Actualizado a las 22:48 h.

La colaboración de vecinos y Policía Nacional impidió la okupación de otra casa en Covas, Viveiro. El hijo de la propietaria de la vivienda, situada en el barrio de Nogarido, agradece la colaboración vecinal y policial para frenar la invasión de ella. «Ves pola tele que hai xente que okupa casas, pero pensas que nunca che vai pasar algo así ata que che pasa», reflexiona Carlos Fernández Sánchez, vecino de Landrove, también en Viveiro. Según relata, la casa perteneció a sus abuelos hasta que fallecieron, y lleva deshabitada en torno a dos años, pero se encuentra en condiciones de habitabilidad. «Hai ano e medio que morreu miña avoa e a casa está para entrar a vivir», apunta. 

Detalla que vecinos de la zona lo llamaron por teléfono tras detectar movimientos extraños de una furgoneta en las inmediaciones de la casa. Fue entonces cuando Carlos avisó a la Policía Nacional, que se personó en el lugar casi al mismo tiempo. «Cando chegamos xa había dúas personas dentro. Como a porta principal estaba pechada, entraran por unha ventana», relata. En ese sentido, comenta que el agua todavía seguía cortada y la electricidad no había sido puenteada. Reconoce que las dos personas fueron correctas y educadas en todo momento, y que la Policía Nacional les pidió la identificación. Su madre, como propietaria de la vivienda, también ha sido citada para declarar. 

Hace algo más de un año, en julio del 2024, a unos centenares de metros había sido okupada una vivienda situada en la calle Río de Loiba, junto a la LU-862. Dos parejas con tres menores a su cargo dañaron la puerta principal para acceder al inmueble. «Pegué una patada y okupé la casa por no meternos debajo de un puente», relató entonces uno de ellos. «Entendo que é un tema complexo, pero non ter acceso a unha vivenda non che dá dereito a okupar algo que non é teu», razona Carlos Fernández.