A Mariña recupera sus grandes verbenas con baile; estas son las nuevas normas en A Pontenova

Hay ganas de fiesta, de bailar en pareja, de disfrutar de las verbenas, de recuperar la añorada normalidad, de ahí la expectación que han levantado As San Lucas de A Pontenova, con un cartel que por primera vez en más de año y medio recuerda a las fiestas de antaño. La legión de seguidores de las orquestas tiene una cita este fin de semana en A Pontenova, con primeras espadas como París de Noia, Satélites o la Ocaband. La comisión organizadora, que lidera el concejal Deportes y Festejos, Jesús Cabodevila, reconoce que se han superado con creces las expectativas. De hecho, apenas han hecho publicidad y han dejado carteles sin pegar, por la repercusión que ya han tenido las fiestas. Pero si bien la situación sanitaria está mejorando a pasos de gigante con la vacuna, no es momento aún de levantar la guardia, de ahí que se vayan a aplicar las medidas sanitarias «a raxatabla».

Para ello, la comisión ha dado el paso de contratar a guardias de seguridad (cuatro en las actuaciones de Ocaband y Satélites y cinco o seis para el domingo, durante la de París de Noia) que se encargarán de controlar el acceso al recinto festivo, en la plaza de Os Fornos, que estará perimetrado, y velar porque se acaten en todo momento las normas: llevar mascarilla, consumir bebidas solo en el bar del recinto, no fumar o mantener la distancia de seguridad. Además, también colaborarán personal del GES de A Pontenova y miembros de la comisión.

Más medidas serán el uso de gel hidroalcohólico y entrada y salida diferenciadas, acceso descargando un código QR (App Orquestas de Galicia) o identificándose manualmente, y el bar tendrá terraza y zona delimitadas y medidas de seguridad.

Se da la circunstancia de que a las 24.00 horas del sábado entrarán en vigor la nueva normativa, más flexible, de la Xunta, que en eventos al aire libre como las fiestas de A Pontenova permite ampliar el aforo del 50 % al 66 %. Ello implica que de las 365 plazas que había estipuladas se pase a 417. La cifra, en todo caso, es muy inferior a la que acudirá a ver a las orquestas en A Pontenova, que se situará en el entorno del recinto ferial. Lo que ocurra ahí, si se respetan o no las normas, ya será responsabilidad individual de cada uno.

Otro aspecto a tener en cuenta es el de la hostelería, que tendrá mucha actividad esos días en A Pontenova. Desde el sábado también podrá aumentar su capacidad (por norma general hasta el 90 %), aunque los horarios permanecen como en la actualidad, con el cierre a la una de la madrugada. El número máximo de personas que pueden juntarse en un grupo pasa de 8 a 10 en el interior y de 15 a 20 en el exterior.

«Hai moita expectación, pero non interesa que haxa desenfreo, senón unha festa tranquila»

Las fiestas las abrirá el sábado Ocaband y Blanco y Negro; el domingo actuarán París de Noia y Blanco y Negro, y el lunes Satélites y Blanco y Negro. Las actuaciones comenzarán en torno a las nueve y media o diez de la noche. Cabodevila explicaba ayer que no tienen aún decidido cómo será el formato, («falarémolo coas orquestras o mesmo día», apuntó) pero en principio darían un solo pase, como ocurrió con la actuación de la París de Noia hace unos días en Lugo, en el San Froilán, con una duración de casi tres horas seguidas.

Cabodevila no oculta una cierta preocupación porque se cumplan las normas para prevenir el covid: «Nós no recinto ímolo garantir, fóra, xa é cousa de cada un. Pero sería unha mágoa agora que se volven a facer festas dar unha mala imaxe. Por iso nós imos ser moi estritos na aplicación das normas. Estiven en Lugo, na actuación da París, e aquí vai ser unha cousa parecida. Hai moita expectación, a xuventude estaba esperando que volveran as festas e eu o entendo, pero non nos interesa que haxa desenfreo, senón unha festa tranquila».

«Levamos ano e pico sen festas, con todo parado, e hai que volver a empezar. Temos que convivir co covid, non hai outra. Hai que abrir todo de novo, senón hai moitos sectores que se van arruinar. Se estamos vacinados todos, hai que seguir. E se facemos as festas así, e porque se pode e porque nos deixan», concluyó.

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