Tras protagonizar reiterados incidentes, está investigado por los supuestos delitos de desórdenes públicos, desobediencia y amenazas
11 sep 2024 . Actualizado a las 22:05 h.Un varón asturiano de 33 años, residente en As Figueiras, en el ayuntamiento ribereño de Castropol limítrofe con Ribadeo, no podrá entrar provisionalmente en el casco urbano ribadense, informaron fuentes judiciales, después de protagonizar en las últimas semanas altercados en diferentes establecimientos de hostelería, comercios y también en el centro de salud. El lunes por la mañana volvió a ser detenido y tras pasar la noche en los calabozos del cuartel de Ribadeo, este martes fue puesto a disposición de la magistrada del Juzgado de Instrucción número 1 de Mondoñedo, que decretó su puesta en libertad, imponiéndole la prohibición de entrar en el núcleo urbano de Ribadeo. Está investigado por los supuestos delitos de desórdenes públicos, desobediencia y amenazas.
Este hombre venía protagonizando desde hace un par de semanas diferentes trifulcas e incidentes en Ribadeo. Desde los establecimientos hosteleros y desde el centro de salud de Ribadeo requirieron la intervención de la Guardia Civil y de la policía local. Aunque se dieron momentos muy violentos con la consecuente alarma social, finalmente nadie se decidía a interponer denuncia. Durante uno de estos episodios conflictivos en un bar, agentes de la Guardia Civil lo identificaron y descubrieron que tenía en su poder perfumes de alta gama. Se lo comunicaron a un establecimiento próximo donde comprobaron que le faltaban perfumes de un muestrario, que fueron valorados en 300 euros. En este caso sí se presentó denuncia y fue investigado por un posible hurto, pasando a disposición judicial. Puesto en libertad, continuó protagonizando incidentes, a los que acudían las fuerzas del orden para apaciguar los ánimos. Al parecer, solo un hostelero lo ha denunciado por ello. Este lunes los acontecimientos se desencadenaron, con altercados en varios bares. Acudió la policía local y cuando huía fue detenido por dos agentes de la Guardia Civil de paisano. Ya en el cuartel, presentó resistencia y pasó la noche en el calabozo. Este martes pasó a disposición judicial y la magistrada del Juzgado de Instrucción número 1 de Mondoñedo decidió su puesta en libertad pero con la medida de prohibirle entrar en Ribadeo.