Así fue la odisea de casi 24 horas de los turistas mariñanos del Imserso para volver a casa

VIVEIRO

Jubilados lucenses del Imserso, en el aeropuerto de Barcelona
Jubilados lucenses del Imserso, en el aeropuerto de Barcelona CEDIDA

Tuvieron que dormir en Cataluña, levantarse de madrugada para volar a primera hora y costearse un taxi a Lugo, para finalmente conducir hasta A Mariña

26 abr 2024 . Actualizado a las 20:29 h.

Este sábado terminó la odisea que vivieron jubilados de A Mariña y otras zonas de la provincia de Lugo que viajaron con el Instituto de Mayores y Servicios Sociales (Imserso) a Cataluña, y que debieron pasar una travesía de casi 24 horas para volver a sus casas.

Unos 50 mayores de la provincia de Lugo, entre ellos de Viveiro y Burela, perdieron su vuelo programado para la tarde del viernes, lo que atribuyen a una salida tardía del hotel al tener que esperar por su guía. Al llegar al aeropuerto de Barcelona no les dejaron facturar porque quedaban poco más de diez minutos para la hora de salida prevista.

Desde las cuatro de la tarde esperaron en el aeropuerto para poder coger otro vuelo, y finalmente los alojaron en un hotel de Caleya, en la zona de Santa Susana, a donde se desplazaron en autobús. Al llegar tuvieron que cenar en menos de media hora, al cerrar el restaurante del establecimiento hotelero, y acostarse para poder dormir al menos unas horas.

Se levantaron de madrugada, algunos de ellos a las cuatro para poder llegar a la hora al aeropuerto, y en dos tandas, volaron desde Barcelona a primera hora de la mañana, unos a Santiago sobre las 6.40 horas y otros a A Coruña sobre las nueve.

Para los que volaron a Santiago, la aventura no acabó ahí. Según uno de los jubilados afectados, les habían prometido que un autobús los llevaría a Lugo, el punto de partida de la excursión. No fue así y «tivemos que buscarnos a vida como puidemos. Uns marcharon á estación de autobuses para ver as liñas dispoñibles e outros xuntámonos para coller un taxi. Pagamos 110 euros», lamenta. Desde la capital lucense, este pensionista viveirense condujo a A Mariña en su coche particular para finalizar la travesía este sábado mediodía, casi 24 horas después de lo previsto. Así, afirma que presentará una reclamación «pola mala organización».

Otros mayores, al haberse desplazado al inicio de las vacaciones, hace once días, al aeropuerto de Santiago en sus coches, y haber aterrizado de vuelta en A Coruña y no en la capital gallega, como estaba previsto inicialmente, tuvieron que arreglárselas para desplazarse desde la ciudad herculina a Lavacolla-Rosalía de Castro.