Un burro cargado de trigo «levou á ruína» a dos empresarios en la «guerra da luz» que hubo en Viveiro

VIVEIRO

Un antiguo trabajador de Begasa que controló durante décadas el funcionamiento de la presa y la central de Xerdiz, Jesús Paleo Fernández, relata un curioso episodio
01 dic 2024 . Actualizado a las 12:40 h.Con una memoria privilegiada, Jesús Paleo Fernández recuerda para La Voz cómo José Barro González fue, además de pionero de la automoción en Galicia, un habilidoso industrial capaz incluso de poner en jaque a quienes consideraba adversarios. Y eso ocurrió por ejemplo en la denominada «guerra da luz», un hecho histórico del que en su día también se hicieron eco, por ejemplo, el cronista oficial de Viveiro, Carlos Nuevo Cal, o el periodista Fernando Salgado en las páginas de La Voz de Galicia. «Ademais de Barro, nos primeiros anos do século pasado en Viveiro había outros dous empresarios que tiñan interese no tema da luz. Eran Justo Taladrid e Benigno López Muñoz», relata Paleo. El último era propietario de la Casa de los Leones, símbolo entonces del poder político, financiero e industrial de la ciudad del Landro, y que todavía continúa en pie.
Una central en Xan Blanco
Según Paleo, uno de los episodios de esa «guerra» tuvo lugar en Xan Branco, en Ourol, donde Taladrid y López habían iniciado la construcción de una central hidroeléctrica. Indica que el canal estaba hecho y habían adquirido incluso todos los derechos de los muíños de parceiros (de varios vecinos), salvo uno. «Pero quedaba un, que foi comprado por Barro, quen foi persoalmente cun burro cargado de trigo desde Chavín ata Xan Blanco para moer e que quedara claro que el necesitaba a auga e que non se podía instalar esa central», indica este antiguo trabajador de Barras Eléctricas. Señala que la cuestión derivó en un pleito en el que José Barro logró imponerse. «Taladrid e Benigno López perderon e a súa empresa foi á ruína», continúa Paleo, quien recuerda que tiempo después el segundo se suicidó pegándose un tiro.