?no de los detonantes de las críticas internas que han salido a la luz es el voto favorable de los concejales del PP a la moción de Esquerda Unida por la que el Concello de Vilagarcía se felicita por la reforma legal que permite los matrimonios entre homosexuales. En este sentido, Fole recuerda que la propuesta defendida por Juan Fajardo fue modificada a instancias del alcalde, Javier Gago, de tal forma que el resultado final era aceptable: «Lo que nosotros apoyamos fue una medida que permite equiparar los derechos de todos los ciudadanos sin que exista discriminación por motivos sexuales, no si esa figura debe ser el matrimonio o si es lícita o conveniente la adopción, que son cuestiones que no entraba a debatir la moción». Para el portavoz conservador el texto que firmaba EU contenía al menos tres puntos inaceptables. Por una parte, la crítica hacia la Iglesia por haberse manifestado contra la reforma del Código Civil: «No es lógico que se intente censurar a la Iglesia por un derecho al que otros suelen recurrir frecuentemente, sin que nadie presente mociones». En segundo lugar, la «imposición que EU pretendía ejercer sobre los concejales, queriendo impedir por decreto que ejerzan la objeción de conciencia». Por último, y como resumen de todo el resto, la propuesta de eliminar la representación municipal de los actos religiosos: «Son los vecinos y las parroquias quienes nos invitan, y acudimos como representantes de ellos que somos», anota Fole, quien reconoce, de haberlo, un único error en la decisión de su grupo: «Deberíamos haber insistido en que se debatiese la participación en actos religiosos en el mismo pleno, y no dejarlo para más adelante».