El Náutico O Muíño atribuye la inundación del club a la apertura del embalse de Caldas

p. penedo VILAGARCÍA / LA VOZ

AROUSA

A falta de su cálculo definitivo, los daños ocasionados por la subida del rio pueden alcanzar los tres mil euros

07 nov 2023 . Actualizado a las 05:00 h.

«O de sempre. O problema é que nunca avisan». Día y medio después, el enfado del coordinador del Club Náutico O Muíño de Ribadumia era todavía a primera hora de la tarde de ayer mayúsculo. Y es que para José Manuel Vázquez la inundación de los bajos de la sede de la entidad deportiva en Cabanelas en la madrugada del sábado al domingo pasados y los destrozos que el agua provocó en parte de su material y embarcaciones era perfectamente evitable aún con toda la lluvia caída.

«Claro que o río ten que botar por fóra cando chove ou cando hai unha marea viva. Pero isto é produto dunha mala xestión. Para que entre a auga no club téñense que aliñar dous astros: marea alta e encoro aberto», apunta Vázquez, que atribuye los desperfectos sufridos en las instalaciones del O Muíño a los responsables del embalse de Caldas de Reis. En este punto, el coordinador deportivo señala que «Caldas vén de inundarse despois de moitos anos e aquí —en Cabanelas— a auga subiu un metro en media hora».

El profundo malestar en el Náutico O Muíño es mayor por cuanto «estabamos convencidos de que o encoro levaba aberto días» para ir evacuando agua «e por riba», añade Vázquez, «ábreno coa marea chea», elevando así todavía más el cauce final del Umia.

Pendientes todavía de estimar el coste de los perjuicios, con estanterías y barcos dañados y material de reparación inservible, Vázquez señala que «inda está no xulgado a reclamación dos 3.000 euros por outra coma esta o ano pasado».