El Hospital do Salnés cerrará el 10% de sus camas este verano

La Voz VILAGARCÍA / LA VOZ

AROUSA

MARTINA MISER

El área sanitaria insiste en que se activarán de forma inmediata de ser necesario

19 jun 2024 . Actualizado a las 05:00 h.

Se acerca el verano y con él, la llegada masiva de turistas que buscan en Arousa un lugar en el que tomarse un respiro. Durante los próximos meses, al comarca multiplicará su población, poniendo a prueba las costuras de sus servicios públicos. La red de aguas, la de saneamiento, la recogida de basuras... Son muchos los elementos que deberán superar una nueva prueba de estrés. Y entre ellos destacan los servicios sanitarios. Hace un año, la situación en los centros de salud de la comarca se hizo especialmente complicada, permaneciendo cerrados los PAC en varias ocasiones, para desesperación de profesionales y enfermos. El presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, anunció este lunes que su gobierno destinará doce millones a evitar problemas en la Atención Primaria, aunque cómo se traducirá ese plan global en el área sanitaria aún no ha trascendido.

Lo que sí parece estar decidido es qué pasará en los hospitales de Pontevedra y O Salnés. Afirma el Sergas que «el área mantendrá durante este verano la disponibilidad del 100% de las camas en sus hospitales». Pero que las camas estén «disponibles» no significa que estén «operativas». El matiz es importante, porque según «el plan de adaptación de recursos asistenciales programados para la inminente etapa estival», operativas estarán el 89% de las camas de hospitalización. El diez por ciento restante, en principio, no deberían ser utilizadas, a no ser que se tenga que activar el «plan de contingencia específico» elaborado por las autoridades sanitarias.

«Ese plan se activaría en el caso de que aumente el número de pacientes pendientes de ingreso sin cama asignada en los servicios de emergencias del hospital y se produzca un aumento de la ocupación global de las plantas de hospitalización», informan desde el área sanitaria. El plan supone, básicamente, «la dotación de personal para utilizar aquellas camas que fueran necesarias, garantizando la continuidad de la atención sanitaria pública en todo momento».

Si no se considera necesario activar el plan, en el Complexo Hospitalario Universitario de Pontevedra (CHOP) se mantendrán operativas 520 camas, el 87% del total, mientras que en el Hospital do Salnés se mantendrán activas para el servicio 108, el 90% del total. Esas cifras se han determinado, explican desde la Xunta, tras analizar los datos de ocupación de los hospitales durante el pasado verano. Según explican desde el área sanitaria, «el porcentaje de ocupación de camas durante los meses del pasado verano del 2023 alcanzó el 79,3% en julio, el 77,7% en agosto y el 74,6 % en septiembre en el CHOP, mientras que en O Salnés la ocupación fue de un 60,6 en julio, de un 54,1 en agosto y de un 52,4 en septiembre».

Desde el área indican que lo que denominan «adaptación de los recursos sanitarios», «se justifica por la coincidencia del período regulatorio en el que la mayoría de los profesionales del Sergas solicitan disfrutar de sus vacaciones y por la disminución de la asistencia hospitalaria».

O Grove espera disponer de al menos un médico extra para atender a desplazados

En localidades como O Grove, los últimos veranos han sido especialmente duros en lo que a precariedad de servicios sanitarios se refiere. «Durante mucho tiempo en O Grove la atención primaria estuvo muy mal, no existía. No se cubrían los médicos de cita ordinaria de adultos, como para pedir refuerzos para los desplazados», recordaba ayer el alcalde socialista de este municipio, José Cacabelos. Sin embargo, la situación parece haber mejorado. «Hay que ser justos, y lo cierto es que acometemos este verano en la mejor situación de los últimos años», señalaba el alcalde.

Aunque no tiene datos oficiales de la gerencia del área sanitaria, la información que el alcalde recibe del centro de salud es halagüeña. «Para los meses de julio y agosto se espera un médico de refuerzo para desplazados, incluso parece existir la posibilidad de que sean dos», indica el alcalde. De confirmarse ese extremo, «de la situación precaria y de atención prácticamente inexistente, pasamos a estar razonablemente bien», afirma el alcalde de una localidad que dobla, y en ocasiones casi triplica, el número de habitantes durante el verano.

Según señala, la mejoría en la dotación del centro de salud comenzó a notarse ya «a partir del segundo semestre del año pasado, cuando se empezaron a incorporar médicos. Ahora, de los siete de adultos tenemos seis. En pediatría la situación no es tan buena, de los profesionales que deberíamos tener solo hay uno y no viene todos los días. El PAC, las urgencias, sí que tiene dotación de médicos y llevamos tiempo sin mayores quejas», explica el regidor.