La capital arousa vive un verano multitudinario: «Vilagarcía sólo necesitaba que la gente la descubriese, y eso está pasando ahora»
AROUSA
La asociación de comercio y hostelería asegura que esta temporada estival es «una de las mejores» que se recuerdan
18 ago 2024 . Actualizado a las 05:00 h.El viernes, la Festa da Auga atrajo a Vilagarcía a miles de personas. Las calles de la ciudad, inundadas durante las celebraciones nocturnas, se convirtieron a mediodía en un hervidero en el que no cabía un alfiler. Aseguran quienes acumulan años de experiencia en esto de acompañar a San Roque desde la iglesia hasta la capilla, que nunca se había visto tal marabunta congregada alrededor de la grúa desde la que se lee el pregón. Que nunca el regreso hacia el centro fue tan lento debido a la cantidad de personas que pedían agua a gritos. En varios negocios de hostelería consultados por La Voz confirman que la Festa da Auga ha batido marcas: neveras vacías, reservas de cerveza agotadas en tiempo récord... Y todo, en un ambiente tranquilo, en el que las incidencias —teniendo en cuenta la gran cantidad de gente movilizada— fueron mínimas.
«El viernes fue un día espectacular, pero en general todo el verano está siendo muy bueno, al menos en Vilagarcía». Quien habla es Rocío Louzán, la presidenta de Zona Aberta, entidad que aglutina al pequeño comercio local y, también, a la hostelería. Este estío «hay mucha gente en la calle, mucha gente comprando, mucha gente en las terrazas», explica. Y que haya mucha gente, señala, es un buen comienzo para los negocios locales, que se nutren de la aquellas personas que pasean por la ciudad.
Al éxito de la Festa da Auga contribuyeron cuestiones como un día radiante y la coincidencia en pleno puente festivo. ¿Y qué explica el éxito del resto del verano? Pues, además de que Galicia es un destino que está de moda, en Vilagarcía, a juicio de Louzán, se están notando los efectos del tren que llega desde Madrid y que ha permitido que, a lo largo del año, mucha gente haya ido descubriendo la ciudad, a la que regresarían ahora para gozar de ella con buen tiempo. «Vilagarcía sólo necesitaba que la gente la descubriese, y ahora está empezando a pasar. Tenemos muchas cosas buenas. La playa que ha mejorado muchísimo, tenemos muy buen comercio, cines y cosas que hacer si sale un día malo... Y estamos a nada en tren de ciudades como Pontevedra o Santiago», explica Louzán.
A todo ello hay que sumar las fiestas, que son otro de los elementos dinamizadores de la ciudad durante el verano. En ese sentido, ha pasado ya la del Auga, pero quedan aún muchas actividades por delante. Entre ellas, otro de los eventos multitudinarios del verano vilagarciano, el Combate Naval, un espectáculo de pirotecnia que reúne en el entorno de la playa a miles de personas.