Catoira protege las Torres de Oeste de la invasión turística de este domingo

Rosa Estévez
rosa estévez CATOIRA / LA VOZ

CATOIRA

OSCAR VíFER

Personal del plan de protección evitará que el público escale el monumento

03 ago 2023 . Actualizado a las 05:00 h.

Con más frecuencia de la debida, los atentados contra nuestro patrimonio natural o cultural se convierten en noticia. Hay de todo. Desde quienes se dedican a deteriorar entornos como la playa de As Catedrais haciendo castillos de piedras, hasta quienes invaden O Obradoiro a gritos y empellones. Desde esos turistas que saltan sobre las imágenes de Las Dos Marías de la alameda compostelana, a aquellos otros que dejan su huella en las conchas de la capilla de San Caralampio, en A Toxa. En Catoira tienen su singularidad en esto de los ataques al patrimonio: se intensifican el primer domingo de agosto, el día del desembarco vikingo, pero no corren a cuenta de las tripulaciones invasoras, sino que son cosa del público que, ansioso por hacerse con un buen sitio para ver la batalla, se dedica a escalar las Torres de Oeste, un monumento nacional en el que muchos no ven más que una grada en la que acomodarse. Esa práctica ha sido habitual durante muchos años, pero desde el Concello quieren poner coto a tan desafortunada práctica. Por ello este año, en los programas de la Romaría Vikinga, se incluye una advertencia: «Non está permitido subir ás Torres». Un mensaje similar se podrá leer el domingo en carteles que serán colocados estratégicamente en el recinto de la fiesta. Y, por si eso no fuese bastante, personal contratado en el marco del plan de seguridad de la fiesta se encargará de vigilar el entorno y frenar a cualquier escalador que intente subir los históricos muros. El alcalde de Catoira, el nacionalista Xoán Castaño, señala que es la primera vez que se toman medidas de este tipo. «Por unha banda, nós temos que velar pola seguridade da xente que acude á festa», explica. Pero además, el Concello quiere salvaguardar su patrimonio y hacer reflexionar a la población. «Se alguén se puxera a escalar pola fachada da catedral todo o mundo daríase conta de que é unha barbaridade. Pois isto, igual».

Un programa pensado para disfrutar a todas las edades

Este martes arrancó el programa de la Romaría Vikinga de Catoira y lo hizo, como suele ser habitual, con el estreno de la obra de teatro protagonizada por vecinos y vecinas de la localidad. Pero lo fuerte llegará a partir de ahora. Mañana jueves comienza a ampliarse el programa, y a la cita de las diez y cuarto de la noche con la historia de Un neno vikingo, se sumará a las ocho y media de la tarde con el arranque de las jornadas Viquinguiña, que en esta ocasión incluye un concierto de Paco Nogueiras.

Ya el viernes, también para público infantil habrá una actuación del Mago Paco en la alameda (19.30), además de los pasacalles de Upsala Medieval, el pregón de Alejandro Guillán, Baiuca (21.30), y en el marco de los Vikinsons llegará a la playa fluvial de Catoira el concierto de Luar na Lubre-Skáld, a partir de las 22.00 horas.

El sábado, la agenda incluye un Xantar Vikingo (14.30 horas), la apertura del mercado medieval en el recinto de las Torres de Oeste, un concierto de Uxía Lambona e a Banda Molona (19.30 horas), y en la playa, a las nueve de la noche, Bloody Sunrise, Celtas Cortos, Dakidarría y Lontreira protagonizarán la gran noche del festival Vikinsons.

El domingo, está claro, llega el desembarco. Desde las diez de la mañana habrá actividad en el recinto de As Torres, donde habrá degustación de mejillones y mercado, actuaciones de Troula y Upsala Medieval, teatro, música infantil con Rudi Dudi (a las 19 horas en la alameda), y como fin de fiesta, concierto de Clara Pino y Pablo Vidal (20 horas, alameda) y Tor, un grupo de folk céltico gallego (21.30 horas).