Meaño: brindis, música y memoria

La Voz MEAÑO / LA VOZ

MEAÑO

Mónica Irago

La localidad abrió anoche la fiesta con la que homenajea a sus vinos

19 jul 2025 . Actualizado a las 05:00 h.

Los pueblos de la orilla sur de la ría de Arousa continúan descorchando fiestas. Este viernes le tocó el turno a Meaño, localidad en la que, hasta mañana domingo, se rendirá homenaje a sus vinos. Será a través de una veintena de puestos instalados en la plaza del Concello. Allí, desde anoche, se abren botellas y se suceden los brindis por todas las cosas buenas de la vida. Cosas como, por ejemplo, los vinos elaborados en la localidad por bodegas grandes, bodegas medianas y bodegas grumet, porque de todo hay en este municipio que, además de ser «corazón do Salnés», es también «cuna do albariño».

La fiesta arrancó con brindis y buen ánimo. Y de alimentar ese espíritu se encargó la Banda Unión Musical de Meaño, que a partir de las nueve ofreció, junto a Antonio Barros y Lys Pardo, un homenaje a uno de los grandes de la música española: Juan Pardo. Juntos, todos estos artistas interpretaron un buen puñado de las canciones que el virtuoso cantante hizo famosas en su día.

La noche habría de prolongarse, aún, con la Orquesta Players y DJ Paco Vukano. Hoy, los puestos abrirán sus puertas a las doce del mediodía. El menú musical comenzará a desplegarse a partir delas diez de la noche, primero con un concierto de A Roda, seguido de las actuaciones de La Oca Band y DJ Quico.

Mañana domingo es el día grande de la fiesta, con la lectura del pregón y el nombramiento de nuevos caballeros y damas. Rafael Louzán, que será nombrado Embaixador de Honra, será también quien se encargue de realizar la alocución de homenaje a los vinos de Meaño. El presidente de la Real Federación Española de Fútbol ha avanzado las líneas maestras de su discurso: «Hablaré con el corazón, no con el cargo. Haré un homenaje sincero a la tierra, a la gente que la trabaja y a todo lo que representa Meaño. Habrá referencias a nuestras parroquias, a nuestras tradiciones, a las gaitas, al pulpo… y, por supuesto, al albariño, que no es solo un vino: es una forma de ser». Y más en Meaño, una localidad en la que, tal y como recordó el alcalde estos días, «é moi rara a familia que non ten vínculos co mundo do viño». A todas ellas, estos días, les toca brindar y celebrarse.