Su meta es realizar mil fotografías para el álbum «Retratos de una vila»
28 jun 2024 . Actualizado a las 11:52 h.Las calles y barrios de O Grove se han convertido en las últimas semanas en un improvisado estudio de fotografía por el que desfilan cientos de vecinos para ser inmortalizados a través del objetivo de Paco Luna, que se ha propuesto llevar a cabo un ambicioso proyecto por amor al arte y a las gentes del municipio, Retratos de una vila. Su reto, fotografiar a mil vecinos durante este año, una idea que hace ya tiempo le rondaba la cabeza, según él mismo confiesa.
La iniciativa tiene tanto tirón entre la gente, que ya cuenta con trescientos retratos, todos ellos sobre un fondo negro que él mismo se encarga de crear allá donde va. La tela, un poco de cinta aislante para fijarla en donde buenamente le permitan, y un taburete, son todo el atrezo que necesita. El resto es magia, porque de una manera totalmente espontánea y natural consigue captar la esencia de cada uno de sus modelos. Algunos parecen actores a quienes la lente ha pillado desprevenidos, otros muestran el alma a través de la mirada y hay quien posa simplemente para que quede constancia de que estuvo allí.
El día que arrancó el proyecto se presentó en la calle peatonal de Castelao para convencer a sus primeros modelos, ya lo había anunciado con anterioridad en las redes sociales para que todos estuviesen atentos, pero el furor llegó con la publicación de las primeras imágenes. Había conseguido enganchar a la audiencia para seguir disparando, así que la afluencia comenzó a multiplicarse y llegaron las fotografías de parejas, de familias, e incluso de reuniones de barrio. Fue ampliando espacios, así que montó también estudio en los exteriores de la Praza de Abastos y se trasladó a algún barrio como Virxe das Mareas.
Poco a poco el álbum de retratos crece en un grupo de Facebook que estos días lograba de golpe unos mil seguidores, A mellor foto do Grove, se llama, y es que los espontáneos modelos quieren verse. Ahí los curiosos van bicheando al vecino y dejando sus piropos. La iniciativa no es baladí, pues cuando estos habitantes falten, quizás la localidad pueda disponer de un buen archivo con sus gentes, aquellas que pisaron el asfalto meco en el siglo XXI.
Explica Paco que ahora que ya ha hecho unas siete salidas, la media de personas retratadas es de unas cuarenta, así que con un poco de suerte para el mes de septiembre, a no ser que las condiciones meteorológicas lo impidan, habrá alcanzado el millar.
Una exposición
A partir de ahí le gustaría crear una exposición con el material, y luego ya se verá, porque obviamente está abierto a escuchar propuestas para mostrar con orgullo a las gentes de O Grove. Esta mañana en el mercado municipal habrá nueva cita con su objetivo, a partir de las once y media.