Vilagarcía pierde a José Recuna, su primer alcalde democrático tras la dictadura franquista

A sus 98 años, Francisco José Recuna Villaverde constituía todo un símbolo de Vilagarcía de Arousa. Es posible que las generaciones más jóvenes apenas reparasen en un hombre ya mayor, de pelo blanco, que cruzaba a diario la ciudad en su bicicleta o en su triciclo, un vehículo mucho más seguro y recomendable a medida que pasaban los años, pero siempre a buena velocidad. Hoy, al hilo de los homenajes y los obituarios, sabrán que aquel hombre risueño fue quien empuñó el primer bastón de mando democrático en la corporación municipal desde que Francisco Franco y sus hordas desataron la Guerra Civil, en julio de 1936, para instaurar una larga y negra dictadura. Recuna encabezó en 1979 la recuperada candidatura del PSOE, que junto al PCE sumó la fuerza necesaria para configurar el gobierno municipal que inauguró en la capital arousana la etapa democrática contemporánea. Una pérdida tan inevitable, con el transcurrir del tiempo, como irreparable.

Como hace unos años recordó José Ramón Alonso de la Torre, José Recuna, nacido en 1927, se licenció en Derecho en 1951 y ejerció como juez sustituto en Vilagarcía en los años 70, al tiempo que regentaba los negocios de su familia. Entre ellos, una popular ferretería, la de Otero, y el añorado cine Fantasio. «Tenía —escribía Alonso en febrero del 2022, con motivo de otro obituario, el de Santiago Ferreira, compañero en aquel gobierno iniciático— ocho apellidos vilagarcianos: los Villaverde, oriundos de Portas; los Rey, emigrantes en Argentina y retornados a Vilagarcía en 1870 por culpa de la peste; los Otero, saga familiar de A Illa; los Recuna, cuyo padre había sido encarcelado en los calabozos municipales, en plena Guerra Civil, y no salió hasta que la familia recaudó 50.000 pesetas gracias a una colecta entre amigos, destacando la generosidad de Amadeo Brumbeck, que puso 10.000».

Un vilagarciano, en definitiva, de toda la vida, popular y querido, que decidió abandonar la política activa a las primeras de cambio, en 1983, cuando la cosa pública cogió velocidad y quienes emergían en su partido, el PSOE, removieron sus entrañas y su estructura con pésimos resultados. Sustituido como cabeza de lista, las siguientes elecciones municipales, precisamente las de1983, abrieron las puertas de Ravella a la derecha.

Desde entonces, Recuna dejó el ejercicio de la política, aunque nunca falló como referencia para los socialistas vilagarcianos, que en el 2014 le rindieron homenaje, con su designación como militante de honra. Esta mañana, el gobierno municipal que lidera otro socialista, Alberto Varela, quiso expresar su pesar por el fallecimiento de un hombre que, a su manera, encarnó el cierre de un círculo y la apertura de un nuevo paradigma, puesto que él mismo era sobrino de Elpidio Villaverde, el primer alcalde de la Segunda República, que tuvo que huir a través de Portugal para evitar una muerte cierta a manos de franquistas y falangistas en el verano de 1936, mientras su mujer y sus hijos vivían un auténtico calvario hasta que pudieron reunirse con él. Una de sus hijas, Mariví Villaverde, recogió el testimonio de aquel tiempo aterrador en la obra Tres tiempos y la esperanza.

«Con tal motivo —acaba de anunciar Ravella— o Concello decreta dous días de loito oficial, o 26 e 27 de febreiro de 2025, en sinal de condolencia coa familia e como mostra de respecto institucional. Durante os días citados ondearán as bandeiras na Casa Consistorial a media hasta».

También la agrupación socialista de Vilagarcía expresó su pesar por el fallecimiento de José Recuna. El PSOE recuerda que la candidatura que encabezó ganó las primeras elecciones municipales de la era democrática con el 31,5 % de los votos y siete concejales. «Nunha Vilagarcía na que estaba todo por facer, o equipo de goberno liderado por José Recuna avanzou na creación dunha serie de infraestruturas fundamentais para a cidade, como a construción da ETAP de Trabanca Badiña, o inicio do Complexo Deportivo de Fontecarmoa coa construción do pavillón de Fontecarmoa, campo de fútbol e pistas de tenis. Tamén foron parte dese deseño de cidade a residencia de persoas maiores, ou a dotación das bibliotecas do Carril, Vilaxoán e da Casa da Cultura no antigo Mercantil da rúa Rey Daviña», subrayan los representantes del PSdeG. Para su secretario xeral, Julio Torrado, «aquel goberno que sentou as bases da actual cidade foi un pioneiro e un visionario». «Será difícil non volver a estar con José, pero Recuna quedará para sempre», apuntó Torrado en nombre de todos los militantes de la capital arousana.

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