Los vecinos culpan de las inundaciones a la firma que gestiona el embalse de Mazaricos
BARBANZA
La compañía asegura que la decisión de abrir las compuertas se tomó para prevenir males mayores Vecinos de los lugares de Ponteolveira y Colúns, en el municipio de Mazaricos, mostraron su malestar por las inundaciones que sufrieron sus fincas de cultivo, de las que hacen responsables a la empresa que gestiona el embalse da Fervenza. Los afectados aseguran que la firma abrió las compuertas para vaciar la presa y el agua encharcó sus labradíos. También están indignados los residentes en Loxo de Abaixo, en el concello de Boiro, a quienes la lluvia privó durante la madrugada de ayer de su única vía de acceso rodado.
08 dic 2000 . Actualizado a las 06:00 h.Los núcleos de Ponteolveira y Colúns fueron los más afectados por las inundaciones que las lluvias ocasionaron estos últimos días. Pero si las circunstancias del clima tuvieron mucho que ver en esas anegaciones, los vecinos no dudan en responsabilizar en parte del desastre a la empresa Ferroatlántica, que gestiona el embalse de A Fervenza. Según explican los residentes en ambos núcleos, la firma libró agua de la presa, que inundó sus fincas de cultivo e incluso llegó a las puertas de sus viviendas. Una vecina de Ponteolveira cargó tintas contra la compañía: «Fan sempre o que queren. Intentan almacenar a máxima auga posible sen perder un litro e, cando hai bo tempo, deixan incluso o río seco; nembargantes, nas épocas de chuvia, enchen ata o máximo o embalse e, despois, abren as comportas inundándonos as fincas de cultivo». La misma afectada señaló que, hace siete años, el agua entró en las casas y alcanzó más de un metro de altura, lo que les obligó a evacuar el ganado de las cuadras y a retirar los coches del garaje. Por su parte, el director de explotación de Ferroatlántica, Román Lozano, explicó que la decisión de abrir las compuertas se tomó precisamente «en previsión de males mayores» y evitar el rebose en el torrente. Lozano indica que el río tenía un caudal de quinientos metros cúbicos por segundo y se libraron cien para que el nivel del embalse descendiese de forma progresiva y no perjudicase a los vecinos. De hecho, la misma empresa también decidió abrir la cascada del Ézaro. Los residentes esperan que baje el nivel de las aguas para poder trabajar sus fincas.