En Porto do Son, Fran Sevilla quiso dejar claro que las guerras no tienen nada que ver con la épica y que lo único que encarnan es un foco de dolor y sufrimiento. Para las víctimas de todas ellas, tuvo emotivas palabras de recuerdo. También se acordó de los colegas que perdieron la vida en el frente de batalla, y mencionó, explícitamente, a Julio Fuentes, Miguel Gil, Ricardo Ortega, Julio Anguita y José Couso. Sobre ellos, dijo que no se puede culpar a nadie de que estuvieran en esos lugares porque eran plenamente conscientes de los riesgos que asumían. Eso sí, puntualizó que, en el caso de Couso, sí es motivo de condena que un tanque bombardee un hotel donde se alojan periodistas. Respecto a su trabajo profesional desde Irak, el reportero madrileño aseguró que nunca recibió por parte de RNE ninguna presión o instrucción a la hora de elaborar sus crónicas. En este sentido, añadió que su jefe de informativos siempre le respaldó y que él nunca habría admitido intromisiones. En su intervención, reiteró la necesidad de los periodistas de ser rigurosos, de defender los valores democráticos y de comprometerse con las víctimas. El ponente dio, además, su impresión acerca de las elecciones norteamericanas, en respuesta a una pregunta del público. Sobre si va a cambiar o no la política de Estados Unidos respecto a Irak, se mostró escéptico y opinó que esa guerra se decidió antes del 11-S.