Una tradición de lo más deportiva

Luisa Gutiérrez luisa.lopez@lavoz.es

BARBANZA

09 nov 2007 . Actualizado a las 02:00 h.

Los miembros del club ciclista Os Aforcados de Boiro repitieron un año más una de sus tradiciones más singulares: la subida al río Pedras, en el municipio de A Pobra do Caramiñal, que este grupo realiza desde hace 15 años. La actividad consiste en ascender por todo el curso hasta el nacimiento, para después bajarlo. Los deportistas tuvieron este año mucha suerte, pues la excursión fue de los más agradable, ya que el tiempo acompañó. Estuvieron, entre otros, Marcos Hermo, Juan Carlos Castro, Juan de Daniel, Miguel Muñiz, Vicente Ordóñez, Luis Couso, José Ramón Torrado, Bernabel Lojo, Manuel Castro y Carlos Alberto Tubío. Al término de la jornada, la totalidad de los participantes se juntaron en el restaurante boirense Don Paquito, de Praia Xardín, para reponer fuerzas y deleitarse con un sabroso y completo ágape. A pesar del cansancio, como consecuencia de estar toda la mañana pedaleando, muchos ya piensan en la cita del año que viene que aguardan con deseosa impaciencia para volver a juntarse

Los miembros de la asociación cultural Aires de Dorna están que lo tiran. Actividades, excursiones, actuaciones y todo tipo de iniciativas figuran en el cuaderno de bitácora de estos ribeirenses. ¿La última? El séquito de bailarines, liderados por su presidenta, Magdalena Bringas, se desplazó hasta la ciudad portuguesa de Gondomar en donde se encontraron con la única asociación de amas de casa de la nación lusa, en Oporto. Allí hicieron las delicias del público con un espectáculo en el que las dos agrupaciones representaron una boda típica de cada comunidad. Un desparpajo que encandiló a los portugueses. Los de Santa Uxía derrocharon talento y simpatía entre el respetable portugués, que se quedó embelesado con esta asociación cultural. Hasta la ciudad viajaron bailarines de todas las edades. Las mayores fueron Magdalena Bringas y Gloria Lijó que interpretaron a las abuelas de los contrayentes ficticios. Destacó el arte y la buena interpretación de Mario Alborés, Catia Cores, Elena Teixeira y Alberto Calo, entre otros. El público luso aplaudió hasta cansarse.