Arousa Norte intenta en la feria Fitur conquistar por la vista y el oído

BARBANZA

29 ene 2009 . Actualizado a las 02:00 h.

Un año más, Arousa Norte intenta estos días en la Feria Internacional del Turismo de Madrid (Fitur) llamar la atención de los operadores turísticos. En esta ocasión, el personal de la mancomunidad se ha decantado por conquistar a través de dos sentidos fundamentales: la vista y el oído.

Al acto de presentación oficial de la propuesta de Arousa Norte acudieron, además de las representantes de la entidad supramunicipal, el director xeral de Turismo, Rubén Lois. Sin embargo, los grandes ausentes fueron los alcaldes. El presidente de la mancomunidad, José Luis Torres, indicó ayer que diversas ocupaciones le habían impedido desplazarse a Madrid y precisó que los cuatro municipios estaban convenientemente representados por el personal de Arousa Norte.

Al término del acto oficial, la gerente, Fátima Rodríguez, subrayó el interés que ha despertado la propuesta: «Este año hemos llevado producto turístico elaborado y hemos puesto de manifiesto que por 75 euros por persona en Barbanza es posible tener oferta de ocio, alojamiento y saborear un menú degustación con productos típicos».

Esto es posible gracias a los bonos gastronómicos y de turismo rural que se venden al precio de 50 euros por pareja. Ambos pueden adquirirse por teléfono desde cualquier lugar puesto que, después de realizar una transferencia bancaria, son remitidos a través de correo postal. La gerente señaló que esta idea ha gustado a los profesionales que buscan ofertas alternativas para viajar en tiempos de crisis.

Montaje

Además de los bonos y de otro tipo de material divulgativo, como arma fundamental, Arousa Norte empleó ayer un original montaje audiovisual, apoyado por los comentarios de Irene Maneiro, que permitió a los profesionales que se dieron cita en el expositor de Turgalicia realizar un recorrido virtual por Barbanza. La visita arrancó en la zona portuaria de Ribeira, con los sonidos propios de un día de faena y de la subasta posterior en la lonja, desde donde los espectadores se desplazaron hasta la isla de Sálvora. El parque natural de Corrubedo y el mirador de Pedra da Rá fueron las otras dos paradas que se hicieron.

Ya en A Pobra, el vídeo trasladó a los espectadores al monte A Curota, desde donde se contemplaron las vistas de la ría arousana, con las bateas como protagonistas; a las piscinas del río Pedras y al Museo Valle-Inclán.

Este recorrido virtual continuó por Boiro, localidad en la que entró en juego otro sentido, el gusto. Para ponerlo a prueba, las imágenes invitaron a los operadores turísticos presentes a utilizar los bonos gastronómicos, con los que pueden degustarse, en una decena de restaurante, menús que conceden un protagonismo especial a los mejillones, a las conservas y a otros productos típicos. Recuperadas las fuerzas, el itinerario continuó por la ruta de As Mámoas.

La playa de As Cunchas, con el sonido de las olas como telón de fondo, fue la primera de las paradas en territorio rianxeiro. Instantáneas que invitaron a un momento de relax antes de la recta final del viaje: la villa de los literatos, el paseo de A Ribeira y la puesta de sol desde Castro Barbudo.

La idea de conquistar a los turistas por la vista y el oído, y de ofrecer la posibilidad de realizar viajes virtuales por Barbanza está también presente en las audioguías. Su particularidad es que pueden descargarse de Internet, desde la página web de la mancomunidad, sin coste.