El temporal dejó un reguero de incidencias y árboles derribados

Jose Manuel Jamardo Castro
j. m. Jamardo RIBEIRA / LA VOZ

BARBANZA

La mayor parte de la flota, excepto la marisquera, permaneció amarrada a puerto debido al mal estado de la mar

15 nov 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

El temporal se dejó sentir ayer en la comarca. La lluvia y el fuerte viento provocaron un reguero de incidencias y los servicios de emergencias tuvieron que emplearse a fondo para atender las numerosas contingencias que se produjeron a lo largo del día.

Protección Civil de Carnota fue requerida para que acudiese a la plaza del Concello. La rama de un gigantesco árbol, de más de 50 años, cedió ante la virulencia del viento y cayó en la carretera de acceso al Ayuntamiento y el centro de salud. Arrastró los cables del tendido eléctrico y dejó sin luz varias viviendas. Al derrumbase se llevó por delante el muro de cierre de una casa.

Los voluntarios trocearon la madera para sacarla del lugar y restablecer la circulación en la zona. En la plaza hay dos árboles más y próximamente se talará el que quedó dañado y otro que está al lado, pues se encuentra bastante deteriorado, según explicó un portavoz de la agrupación.

El mobiliario urbano también trajo de cabeza a los servicios de emergencias. Principalmente los contenedores que, en algunos casos, se desplazaban de un lado para otro sin control alguno. El GAEM de Ribeira tuvo una mañana muy ajetreada. Los recipientes para la recogida de la basura no paraban quietos y se vieron en la necesidad de retirarlos y sujetarlos en condiciones. También acudieron a coger de la calzada los restos de un espejo en Carreira y numerosas vallas de obras. Sobre la una de la tarde estuvieron en el lugar de Sego, en Artes, donde estaba cortada una pista debido a la caída de un árbol que impedía el paso.

Derrumbes

La situación en Boiro también fue bastante movida. Operarios del parque de bomberos retiraron de la calzada un árbol que obstaculizaba el paso en la carretera de Noia, en Moimenta. Por su parte, el Grumir fue requerido en diversos puntos del municipio para levantar contenedores de basura y acondicionar varias pistas localizadas en los lugares de O Loreto, Sobeiral y O Chazo debido al desprendimiento de terreno. Protección Civil de A Pobra retiró un árbol de Cabío y tuvo que recoger tres contenedores del mar que habían volado.

La villa noiesa tampoco se escapó de las dificultades que ha puesto el temporal a la comarca. El grupo de emergencias fue requerido en diversos puntos. Según un portavoz de Protección Civil, la caída de árboles provocó diversas salidas pues entorpecían la circulación en varias vías. Otra incidencia que les obligó a intervenir fueron los paneles de las elecciones que en algunos casos salieron volando. La crecida de los ríos preocupa a las autoridades y se está llevando a cabo una intensa vigilancia y, más aún, después de conocer que se han abierto las compuertas del embalse del Tambre.

El grupo del GES de Muros acudió a Outes para retirar un pino que obstaculizaba el paso de vehículos en una carretera local. En la villa muradana un eucalipto se desplomó en la calzada de la carretera Ribademar-A Barreira. También se acercaron hasta las proximidades de la guardería de Esteiro ya que cayó un cristal de un edificio encima de un vehículo y podía ser un peligro para los viandantes.

Por otra parte, cabe señalar que la mayor parte de la flota pesquera de la comarca permaneció amarrada. Los barcos del cerco, artes menores y arrastre estuvieron al abrigo en puerto. En algunos sitios salieron a faenar las embarcaciones que se dedican al marisqueo como en Ribeira y Noia, pues en esta localidad los productores trabajaron al abrigo en la zona de A Misela.

El fuerte temporal también se dejó sentir en el lugar donde encalló el Divina del Mar. Las olas lo movían de un lado para otro y, según testigos presenciales, la nave ya está bastante deteriorada. Ahora se espera a que amaine para intentar desguazarlo.