Glaciación

Alicia Fernández LA CRIBA

BARBANZA

10 dic 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

Ahora que andamos a vueltas con una nueva ley sobre el consumo de tabaco en espacios públicos y privados, recuerdo cuando la llamada ley antitabaco (Ley 28/2005, de 26 de diciembre) entró en vigor y muchos —entre ellos un gran número de hosteleros— poco menos que la tildaron de preludio del apocalipsis. Pero bien al contrario, en poco tiempo fue asumida por los ciudadanos de este país sin problema alguno. Es más, pronto muchos detractores se convirtieron en defensores de la norma.

Ocurre igual con el covid. Si al principio, por inercia y desconocimiento, había un cierto grado de incumplimiento, a día de hoy —sin especial presión de controles— se observan en general las normas; incluso algunas que ya no tienen vigencia. Estos días se hacía eco La Voz de Galicia de Barbanza de las cancelaciones de cenas de Navidad —de empresa, familia o amigos— que se están produciendo. Sin duda, un severo revés a los ya muy castigados establecimientos de hostelería que tenían en esas tradicionales celebraciones un importante balón de oxígeno para la dura travesía de los primeros meses del año.

Había una incipiente recuperación económica y, de repente, se ha parado de nuevo. No hizo falta adoptar medidas muy extremas, han sido los ciudadanos quienes han puesto el freno. Pero eso provocará a corto plazo un evidente riesgo de enfriar demasiado la actividad cuando la nueva cepa del virus no tiene casos graves documentados y la presión sobre el sistema sanitario es asumible.

Si a esa tendencia social le sumamos la espectacular escalada de precios al consumo, se masca la tragedia. Esperemos que quienes patronean estén a la altura.