El técnico deportivo Miguel Ruiz recibió un homenaje al término de la caminata
15 oct 2023 . Actualizado a las 18:12 h.Con la lucha contra el cáncer como motor de empuje, una gran marea verde inundó en la tarde de este sábado las calles de la ciudad ribeirense y el paseo de Coroso. La integraban las más de setecientas personas que se sumaron a la llamada realizada con el propósito de reunir fondos para que la investigación de una enfermedad que deja a su paso un reguero de tristeza y sufrimiento no decaiga.
Por encargo de la junta local de la Asociación Española Contra el Cáncer, la entidad vecinal de Carreira preparó un recorrido fácil y apto para todo tipo de personas, que partió desde la plaza del ayuntamiento y discurrió por el Malecón y el paseo marítimo hasta la punta de Coroso. A la ruta incluso se sumaron una veintena de usuarios de la residencia de la tercera edad, que acompañados por voluntarios llegaron hasta la mitad del arenal.
Ramón Sampedro, directivo de la asociación de Carreira, ejerció de guía, dando la salida a los participantes y cediendo la palabra, al llegar al final de Coroso, a dos ribeirenses que lograron ganarle la batalla al cáncer. José Cardalda Novo recitó dos poemas: El doliente, de Óscar Hanh, y Mi vida huele a flor, de Elvira Sastre. Juan Carlos Brión Lema le puso voz a una selección de versos inspirados en el valor de la vida y en la importancia de buscar la luz al final del túnel. Ambos incidieron en la necesidad de concienciar a la población y seguir dedicando recursos para tratar de combatir una enfermedad que, directa o indirectamente, golpea a todos.
Sorteo de regalos
De regreso al punto de partida fue la presidenta de la asociación local contra el cáncer, María José Carreira, la que se dirigió al respetable. Primero, para agradecer el apoyo brindado por los ribeirenses que integraron la marcha verde y luego, para enumerar los motivos que llevaron a la entidad a elegir a Miguel Ruiz Rivas como el homenajeado de esta segunda andaina. Destacó el apoyo que siempre le ha brindado a los deportistas y la labor realizada para promover el deporte en el municipio, argumentos a los que sumó el hecho de estar atravesando actualmente un cáncer. Un familiar recogió en su nombre una figura conmemorativa.
El colofón llegó en forma de sorteo de una veintena de regalos que fueron donados por establecimientos comerciales y hosteleros, entre los que había cenas, desayunos y muchos vales de descuento.
Ya de mañana se registró un gran ambiente en la plaza del concello, donde hubo una demostración de kempo y una clase abierta de bailes latinos.