María Alborés se acaba de graduar en la Royal Academy of Fine Arts con un homenaje a la mujer gallega. Así es su última colección
23 jun 2025 . Actualizado a las 18:26 h.Desde Amberes hasta Boiro, pasando por las páginas de revistas internacionales y el cuerpo de una ministra [la de Educación belga], el universo de María Alborés Lojo sigue creciendo sin perder el vínculo con sus raíces. La joven diseñadora gallega acaba de presentar su colección final de máster en la prestigiosa Royal Academy of Fine Arts de Amberes —el mismo centro que ha formado a grandes nombres de la moda europea— y lo hace después de un año tan exigente como ilusionante.
María ha cerrado su etapa formativa por todo lo alto. Su colección, titulada Lost in tradition, found in Galicia, se presentó los días 6 y 7 de junio en el desfile de graduación del departamento de moda. En ella late un homenaje profundo a la mujer gallega, especialmente a las abuelas, verdaderas matriarcas de una sociedad que durante generaciones sostuvieron el hogar y la cultura mientras los hombres emigraban. «Es mi forma de abrir las puertas de mi casa», explica.
Cosiendo su palmarés
Pero además de presentarse en uno de los escaparates más potentes del diseño emergente europeo, este año María ha conseguido otros hitos notables: vestir a la ministra de Educación de Bélgica con una de sus creaciones para la portada del especial del Día de la Mujer Trabajadora en la revista Nina; ganar el primer premio en la categoría de fotografía de Xuventude Crea 2025; o participar en un editorial de Knack Weekend dedicado a la modelo belga Louise Robert. Sus diseños también han tenido presencia en Elle Belgium, consolidando una trayectoria que ya apunta más allá del circuito académico.
La colección final del máster es una reinterpretación artística del traje tradicional gallego femenino. Explora volúmenes, movimientos, texturas y detalles, siempre con una mirada contemporánea. María se aleja del folclore y apuesta por una Galicia luminosa, llena de vitalidad y color. Se inspira cromáticamente en la obra de Joaquín Sorolla, empleando tonos vibrantes que evocan luz, calidez y mar. «La colección también incluye varias referencias al mundo marítimo y pesquero, un guiño directo a mis orígenes», revela.
En lo técnico, también se ha permitido innovar: utiliza tejidos reciclados, materiales técnicos y cuero, y ha trabajado con artesanos gallegos en piezas clave. Con Julia de la Cal, de La Parabólica, desarrolló tres creaciones en cestería, y con Ezequiel, de Raíces Nómadas, una línea de bolsos hechos a mano. Los zapatos, diseñados por su amiga Noemí Vidal, completan el estilismo con coherencia y personalidad.
Respeto por la artesanía, amor por Galicia y ambición internacional se entrelazan en el trabajo de María Alborés. «Ahora quiero descansar unas semanas en Boiro y disfrutar del verano gallego», confiesa. Pero su próxima meta ya está en el horizonte: entrar en una gran firma de lujo. Su talento y recorrido hacen pensar que es solo cuestión de tiempo.