El pincel que rememora las felices estancias de la niñez en Porto do Son

Gisela Fernández / m. x. b. RIBEIRA / LA VOZ

PORTO DO SON

CARMELA QUEIJEIRO

Plasma en cuadros las estampas de los paisajes que recordó durante el confinamiento

20 jul 2023 . Actualizado a las 05:00 h.

En un mundo donde la expresión artística se convierte en un refugio para la mente y el alma, una exposición de arte pasa a ser una ventana abierta a un espacio lleno de un sinfín de sentimientos y significados. En el caso de O Son de Isa, la autora, Isabel Millares, hace un recorrido por su infancia. Esta muestra estará abierta hasta finales de julio en la casa de la cultura de Porto do Son

La artista, que reside en Santiago de Compostela, lleva el mundo del arte en la sangre. Siempre le ha gustado pintar, desde que era muy pequeña, aunque principalmente diseñaba. «Non podería dicir en que momento exacto comecei con isto da pintura e do debuxo, lévame gustando dende que teño uso de razón, pero sobre todo, o que máis facía era deseñar. Acórdome que soia facelo en cada recuncho, todo o tempo, xa fose entre clases, nun bar...», explica.

Isabel estudió el grado de Filología Inglesa en la Universidad de Santiago de Compostela, y desde entonces, es profesora. De primeras, montó un centro de estudio con otros maestros santiagueses, una iniciativa que funcionó con éxito desde el comienzo. Más tarde, debido a una gran rotura de pierna que le provocó estar tres años en recuperación, apostó por un centro de enseñanza más pequeño, dedicado también al inglés: «Estou encantada con este traballo e co que montei. Os meus alumnos, ao igual que os familiares, son xente marabillosa. Ademais, moitos deles retornan á academia cada ano. Manteño unha porcentaxe do cen por cento de aprobados».

A pesar de dedicarse al mundo de la enseñanza, eso no le impidió aprender por su cuenta todo lo que implicaban las artes, principalmente la pintura, investigando y leyendo todo lo que tenía que ver con este ámbito: «Non considero que fose autodidacta, xa que sempre tes influencias de todo tipo, e agora cas tecnoloxías aínda máis. Non teño estudos de arte, pero dediqueille moito tempo a aprender e a investigar esta rama pola miña man. Había momentos nos que non me daba conta da hora despois de pasarme todo o día lendo e pintando».

Sin formación artística

Con todo, acudió en dos ocasiones a alguna academia de formación artística, pero debido a que no era capaz de compaginarlo con su trabajo y otros asuntos, terminó dejándolo. Entre las dos períodos, apenas sumó un total de dos meses yendo a clases.

El confinamiento motivado por la pandemia, fue el ideal para la inspiración de Isabel Millares. Como tenía mucho tiempo libre, empezó a sumergirse en la técnica de la acuarela. Pintaba muchísimo, pero no era consciente de lo que estaba haciendo hasta que un día, repasando todas sus obras, vio que lo que ilustraba en sus cuadros eran paisajes del municipio de Porto do Son. De esta manera, realizó todo un recorrido por su infancia, ya que siempre se iba a veranear con su familia al municipio barbanzano: «Todas as veces que fun alí pasar as vacacións marcáronme e decateime diso con todas as paisaxes e lugares de Porto do Son plasmados nos meus cadros. Teño expostos, por exemplo, debuxos do monte Louro, a Casa do Holandés, as Furnas... Pintei practicamente toda zona, e son arredor de 30 obras».

Además, el título elegido para la exposición, O Son de Isa, hace referencia, por un lado, al nombre del municipio y, por otro, a la actividad musical que desarrollaron varios de sus familiares, que tenían un grupo con el que llegaron a sacar un disco.

Isabel está muy contenta y emocionada con su exposición. Asegura que va a seguir trabajando en su profesión, al igual que también continuará dedicándole tiempo a este mundo artístico que tanto le gusta, creciendo a su vez como persona.