Un artículo publicado en la revista «Nature» revela que la energía que transporta una ola ha aumentado desde 1945
16 ene 2019 . Actualizado a las 17:32 h.El progresivo aumento de la temperatura media global está modificando la energía que la atmósfera le transmite al océano. «Los mares están asumiendo más del noventa por ciento del calentamiento extra. Esto ha provocado un incremento en la cantidad de energía que transportan las olas», reconoce Íñigo Losada, director de investigación del Instituto de Hidráulica Ambiental de la Universidad de Cantabria. Losada acaba de publicar un artículo en la revista Nature Communications que revela que la fuerza del oleaje ha aumentando un 0,4 % cada año desde 1948. «En Galicia puede haber olas del noroeste, norte o nordeste y la diferencia fundamental entre ellas son la dirección, la altura y además el período, que es lo que está aumentando. Las olas del nordeste tienen un período de unos seis segundos, las del norte de diez y las del noroeste, que llegan con los grandes temporales, de hasta veinte segundos. La relación entre la altura y el período define la potencia de una ola», comenta. La investigación menciona el caso de los temporales que hubo en el Atlántico norte en el 2014 y que impactaron con tanta fuerza en la costa gallega. «Las olas que se crearon, en realidad no eran mucho más grandes que las que suelen formarse durante los inviernos en Galicia pero los períodos sí eran muy largos y por tanto transportaban mucha más energía. Esto explica por qué los daños fueron tan notables», confiesa Losada. Lo que está cambiando por tanto es el tiempo que pasa entre que llega una ola y la siguiente. «En un día de nordeste el mar está muy caótico y no puedes distinguir la cresta de una ola de otra. Pero en una situación de noroeste se aprecia claramente cuando llega una y la siguiente», añade.
El trabajo de Losada revela que la energía de las olas está aumentando sobre todo en las cuencas oceánicas del hemisferio sur pero reconoce que Galicia se encuentra entre las zonas más vulnerables. «Es una comunidad muy expuesta a los grandes mares de fondo. La tendencia indica que no va a haber grandes cambios en cuanto a las olas pero los temporales como el que hubo en el 2014 vienen de la mano de grandes borrascas que cada vez se formarán con mayor frecuencia. Además, en términos de impacto hay que añadir que esto vendrá acompañado del aumento del nivel del mar. Si sumamos estos dos factores Galicia tendrá cada vez más episodios de erosión e inundaciones», apunta. Los expertos aseguran que hay tres factores que aumentan los riegos de una zona costera y que Galicia presenta al menos dos: La amenaza y la exposición. «Sabemos que las olas serán cada vez más energéticas y que el nivel del mar está creciendo. Si además estamos construyendo cerca de una costa ya de por sí vulnerable, el riego aumenta peligrosamente», advierte.