SUCEDIÓ EN 1979
20 ago 2004 . Actualizado a las 07:00 h.Una de las noticias más pintorescas que dio la España milagrera de los años 70 fue la proclamación del papa Clemente Domínguez en El Palmar de Troya. En esta localidad instaló, además, un gran templo donde, entre otras cosas, se fabricaban obispos en cadena, casi todos jóvenes amigos de su santidad. Este joven visionario santanderino decía estar ungido por la gracia directa de Dios, pero el Altísimo no le debía tener en buen concepto, pues al poco tiempo de manifestarlo tuvo un accidente de circulación que lo dejó completamente ciego. Entre otras lindezas, el papa Clemente proclamaba masivamente beatos y santos. Entres éstos destacaban José Antonio Primo de Rivera, el general Franco, el almirante Carrero Blanco y Blas Piñar. A finales de agosto de 1979 realizó una gira por Galicia para hacer adeptos. Le acompañaron doce de sus obispos. Comenzó su viaje por Lugo, continuó por Ferrol y A Coruña, hasta Santiago, donde visitó la catedral e hizo un recorrido por el casco antiguo. Clemente y su corte hicieron gala de estar bien forrados de dinero, pues en todos los hoteles y restaurantes dieron suculentas propinas.