carballo | Jennifer Boquete Pulleiro, de 25 años, atiende el quiosco de información turística de Vimianzo desde el 1 de julio gracias a una beca de la Consellería de Turismo de la Xunta de Galicia. Asegura que se trata de una oportunidad para conocer mejor el turismo de la Costa da Morte. «El trabajo no es excesivo. La gente es muy simpática. Suele estar contenta. Como la mayoría está de vacaciones lo toman con mucha calma».
-¿Cuál es la situación del turismo en Vimianzo?
-La situación está bastante controlada. Ahora sí que viene más gente. Al principio, durante el mes de julio no venía tanta.
-¿De cuántos turistas estamos hablando?
-La media de visitantes en esta localidad ronda las 200 personas por semana. Hay poca gente que pernocta en Vimianzo. Muchos están de paso o duermen cerca o están hacia la costa.
-¿Qué tipo de turistas visita Vimianzo?
-Gallegos y madrileños. Luego hay bastante italianos, franceses e ingleses. La verdad es que hay bastante variedad. La mayoría conocen al castillo y quieren información sobre él. Luego quieren saber más sobre el concello o las rutas. Muchos también quieren destinos más amplios sobre todo la Costa da Morte.
-Hablando de las rutas, ¿cuales aconseja a los visitantes?
-Damos un folleto con cuatro itinerarios: el valle de Vimianzo y el monte Faro; otra sería hacia el mar: es la ruta que cogen cuando van hacia Camariñas; otra ruta sería hacia las Tierras de Xallas y allí se encuentra la ruta de los dólmenes. Finalmente hay otra propuesta, la que se centra en la localidad de Laxe, en la orilla del río Grande donde hay los batanes y los molinos de O Mosquetín. También por allí se va a la laguna de Traba.
-¿Entre las ofertas hay algunas relacionadas con el ecoturismo que, en la actualidad, está muy de moda?
-Son numerosos los turistas que se interesan por el ecoturismo, que viene a ser el turismo marcado por el senderismo y que en muchos casos asocia la cultura.