El BNG cerró la campaña electoral con sendos mítines en Laxe y Vimianzo. El primero reunió a los nacionalistas de toda la comarca de Bergantiños, que acudieron para dar el último empujón a sus candidatos, Belén Lendoiro y Xoán Sande, con la ayuda del alcalde de Carballo, Evencio Ferrero, y de los representantes locales del BNG. El portavoz del grupo municipal, Xosé Manuel Pose, incidió en que los recortes «non son tan lonxanos como algúns queren facer ver, senón que tocan directamente a Laxe» y a la Costa da Morte.
El otro punto de encuentro nacionalista estuvo en Vimianzo, con los alcaldes Manuel Antelo y Manuel Muiño como invitados en el último mitin del número 10 del BNG, Modesto Fraga. El fisterrán incidió en la necesidad de un voto masivo «para que o BNG faga na Xunta o que fai nos concellos onde goberna». El gobierno autonómico debe luchar, dijo, por los sectores productivos y por un plan de empleo «que free a sangría do paro e da emigración», y para ello hace falta, añadió, «un partido 100 % galego».