«Pensé que ya nunca podría ver a Kula Shaker, hasta hoy»

La Voz

CARBALLO

La coruñesa María Jesús Cababa se quedó con las ganas de verlos en Beniccàssim hace 18 años

15 ago 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Por más que varias fuentes y conocedores de este panorama indie incidiesen en que el cartel del VdeValarés reservaba el sábado muchas sorpresas y grupos que iban a fascinar, la expectación se había centrado, en gran medida, en la actuación de Kula Shaker. La banda británica se subió al escenario a las 01.40 horas. «Ok, ¿qué tal?», animó Crispian Mills nada más ponerse ante el público. Para muchos ver a este grupo en Balarés era un sueño cumplido que tardó diez años en materializarse, como incidía hace tan solo unos días el propio Adrián Varela, a la cabeza de la organización. Conscientes del lugar en el que estaban, Mills, entre canción y canción, hasta se animó a invitar a los presentes a disfrutar del festival y «a nadar en el mar». Usó en español la palabra «Gracias» en varias ocasiones. La leyenda quedaba patente en los coros que hacía parte del público. Al lado de la mesa de sonido, en la zona habilitada para personas con problemas de movilidad, María Jesús Cabana disfrutaba sentada de lo que veía. Al lado, sus muletas: «Tenía abono para los tres días, pero con esto del pie solo vine hoy», contó recién terminado el concierto de los británicos. Si antes se hablaba de un sueño cumplido, en su caso la historia también iba por ese camino: «Hace 18 años fui al festival de Benicàssim para verlos, pero el día anterior tuvieron un accidente y no llegaron a actuar. Después, se separaron». El tiempo de una mayoría de edad tuvo que pasar para que esta coruñesa pudiese estar a unos metros de ellos: «Pensé que ya nunca podría ver ya a Kula Shaker». Hasta el sábado, en VdeValarés. «Me he quitado una espina. Para mí ha sido maravilloso», confesó.