Una residente en O Ézaro tuvo el primer bebé del año
04 ene 2024 . Actualizado a las 05:00 h.El año 2022 terminó con 147 nacimientos en el hospital Virxe da Xunqueira de Cee. Era la cifra más baja en sus más de veinte años de historia, y sobre todo eran 32 menos que en el ejercicio anterior, lejos además de los más de 200 de muchos años. Y el 2023 ha remontado. Poco, pero lo ha hecho: el 31 de diciembre la estadística cerró con 151 partos. Solo cuatro, pero cuatro más.
Y el primer nacimiento en el Virxe da Xunqueira ha sido madrugador a todos los efectos. Ocurrió el 1, a las 5.27 de la mañana. Fue un niño, Darío Alonso Martínez, que pesó tres kilos y seiscientos gramos. Todo discurrió bien, sin problemas. Y, curiosamente, no tardó mucho en haber dos alumbramientos más, así que ya van tres en los primeros tres días del año, una media que no se recuerda. Más curioso aún es que el día 31 también hubo un nacimiento, y el 29 se habían producido otros dos. Así que en realidad son seis en total en apenas una semana.
La madre de Darío, Rocío, y el padre, José Martínez, residen en O Ézaro, aunque ella es de Vigo y él, de Muros. Comentaba ella, ayer, que todo se había desarrollado con normalidad. Es su primer hijo.
El hospital Virxe da Xunqueira presta servicio a los vecinos de Soneira y Fisterra, y los de Bergantiños y Cerceda acuden al Teresa Herrera, el materno. De la comarca bergantiñana, según los cálculo sanitarios, la cifra de alumbramientos ronda los dos centenares al año. Y eso en un contexto que afecta al conjunto de la comarca (y resto de Galicia) de descenso de la natalidad. Sin embargo, ese contexto parece ajeno al hospital coruñés, que lleva dos años consecutivos de incremento (superaron de largo los 2.100 casos), siendo cesáreas uno de cada cinco partos, y múltiples, también en el Teresa Herrera, 35 en todo el año.
Es también relevante la elección de los hospitales públicos del área sanitaria, que capara cerca del 80 % de todos los alumbramientos, según datos oficiales. En el materno, los profesionales realizan el seguimiento del embarazo de más mujeres que las que finalmente acaban dando a luz en él (sobre unas 2.900), y la práctica totalidad de los embarazos de riesgo, con patología, gemelares, prematuros y otros, sí lo hacen en el centro coruñés de referencia. En este sentido, también ayudan los cambios y mejoras estructurales de las instalaciones que, sin llegar a la comodidad (por la individualidad y otros factores) de los centros privados, sí han caminado en ese sentido. El primer bebé de este año 2023 en el materno coruñés, por otra parte, fue de una pareja de Carballo, Corina y Eloy: Hugo, que se suma a su hermana, Paula, en la familia.