La iglesia de San Martiño de Rodís de Cerceda experimentará la primera gran actuación integral en 121 años
CARBALLO
La delegada de la Xunta, Belén do Campo, anunció este lunes una inversión de 157.000 euros para la reforma del templo
04 nov 2024 . Actualizado a las 18:45 h.«A última actuación integral levada a cabo na igrexa foi en 1903. Dende entón se fixo algunha pequena reforma, como a de hai sete anos. Pero un traballo integral nunca se fixo». Así resumió el párroco Manuel Chouciño los trabajos que la Xunta acometerá en la iglesia de San Martiño de Rodís, en Cerceda.
La delegada de la Xunta, Belén do Campo, acompañada por el director territorial de la Concellería de Cultura, Lingua e Xuventude, Severino Ares, y del alcalde de Cerceda, Juan Manuel Rodríguez, anunció en su visita a la parroquia que el Gobierno autonómico destinará los 157.000 euros necesarios para proceder la restauración del templo. Belén do Campo explicó los pormenores de los trabajos: «A obra consistirá no desmontaxe do falso teito de madeira para levar a cabo posteriormente a execución da cuberta da nave con madeira e cobertura de tella curva sobre placas de fibrocemento, limpeza de vexetación nos muros e encintado das xuntas entre as pedras de coroación dos muros con morteiro de cal hidráulica». Estas actuaciones irán acompañadas de otras labores, como una nueva instalación eléctrica, un pararrayos y la protección de una pintura mural situada en la parte posterior del retablo del presbiterio. Unos trabajos, en definitiva, que lo que buscan es poner en valor una iglesia incluida en el Catálogo do Patrimonio Cultural de Galicia.
La redactora del proyecto, Tamara Fraga, con raíces familiares precisamente en la parroquia de Rodís, dijo que, si todo marcha según lo previsto, las obras quedarán listas a finales del próximo año. Con respecto a la redacción de proyecto, señalo que no se trata de algo complicado, pero sí advirtió de que el templo presenta un estado «preocupante». Con este plan de trabajo se prevé que la iglesia de San Martiño de Rodís recupere el esplendor y la belleza «que tiña no século XVIII», como apuntó el párroco.