Especial calefacción | Hay modelos de estufas que se pueden encender desde el móvil
23 nov 2025 . Actualizado a las 21:53 h.Si no está la economía familiar como para hacer grandes inversiones, o si solamente se necesita calefactar una estancia concreta, los empresarios del sector recomiendan estufas de pélet o leña, así como la tradicional cocina tipo bilbaína, por encima de los radiadores eléctricos. «A maioría da xente escapa do gasto eléctrico porque é imposible de controlar, e máis con estas flutuacións no prezo», indica Pablo Pedrouzo desde JM Pedrouzo.
La cocina de leña sigue teniendo su mercado, especialmente en la zona rural y en las casas en las que ya las había anteriormente: «Es muy práctica, porque te permite cocinar al mismo tiempo que te calienta la estancia, y los modelos que han salido los últimos años son mucho más fáciles de limpiar. Además, tienen una vida muy larga», sostiene Tatiana Rodríguez desde Suministros Lar.
Mucho se ha avanzado también en las estufas de pélets, que pueden incluso conectarse a una aplicación móvil para encenderlas a distancia «y encontrarte la casa templada cuando llegas del trabajo», añade Tatiana, o bien modular la temperatura y la intensidad del calor. «Es más fácil que con la leña, porque la propia máquina va dosificando la cantidad de pélet que tiene que soltar para mantener una ambiente estable», explica.
Estufas canalizables que permiten calefactar otras estancias o calentar agua
Aunque el pélet o la leña están lejos de ser los sistemas más elegidos como calefacción central, sí pueden emplearse para calentar otras estancias de la vivienda y no solamente en la que se ubican la estufa o la cocina en cuestión. «Hai moito tempo que vendemos canalizadas de aire» —explican desde JM Pedrouzo— «a estufa normal quenta a habitación na que está, e despois un insertable tipo cheminea envía o calor a outras estancias», añaden. Y lo mismo con las cocinas de leña, indica por su parte Tatiana Rodríguez.
Hay quien incluso va más allá y se hace con hidroestufas que permiten calentar agua. «Tanto a dos radiadores como a auga sanitaria da vivenda. Algunha xente decide poñer un termo para que lle funcione durante o verán con electricidade e despois, xa no inverno, empregan a estufa», sostiene Pablo Pedrouzo.
Precios menos fluctuantes
Siempre lo tuvo, pero la economía tiene ahora más peso que nunca a la hora de decantarse por un método de calefacción u otro. Y aunque a nivel medioambiental no sean los más recomendables, un porcentaje amplio de los consumidores acuden a los combustibles fósiles al tener precios «en general menos fluctuantes que la electricidad», considera Tatiana Rodríguez, lo que permite a las familias «hacerse un presupuesto más certero para el invierno y calcular más o menos cuánto se quiere gastar», añade.
Pese a todo, José Bascuas, de Mi Electro, rompe una lanza en favor de las estufas de calor azul: «Hai que dicir que os últimos modelos que están saíndo teñen menos consumo. O que máis se vende agora é como apoio ou para antes de comezar a tempada de frío, para non acender a calefacción central», explica el empresario, que desde 2020 regenta en la rúa Barcelona una de las tres tiendas de las que consta su negocio, que también opera en Santa Comba y Bembibre.