Huguette Periscal, corazón de música y medicina

Patricia Blanco
PATRICIA BLANCO CARBALLO / LA VOZ

CARBALLO MUNICIPIO

Huguette, con la harmónica, en la que la introdujo su padre
Huguette, con la harmónica, en la que la introdujo su padre ANA GARCIA

Gentes del Finis Terrae | Ella es la voz de Quercus Blues, dúo de blues #madeinCarballo, con Andrés Rey a la guitarra

24 ene 2024 . Actualizado a las 05:00 h.

«Eu xa nacín así», asegura Huguette Periscal (1966) cuando se le pregunta quién está detrás de su gusanillo artístico. «Tivérame gustado ser cantante profesional, a música era o primeiro para min, e a medicina o segundo. Pero meu pai non me deixou...», confesó riendo la carballesa durante la entrevista que Mon Lendoiro y Fran Rodríguez le hicieron en la sección O recuncho de Mon, en el programa Voces de Bergantiños. También ahí, en Radio Voz, mostró la otra cara de la moneda, porque finalmente se quedó con la vía alternativa: «Hoxe estoulle agradecida a meu pai, todos sabemos o complicado que é ser artista neste país. Non sei que tería pasado de non facerlle caso, pero estou contenta co que son. Gáñome a vida sendo médica e grazas a iso podo permitirme o luxo de ser cantante», explicó.

Huguette visitó los estudios para hablar de su grupo, Quercus Blues, del que ella es uno de los corazones. El otro, su marido, Andrés Rey, Andy King, quien no pudo participar de la charla por motivos laborales. Quercus es, en esencia, un dúo, pero para ocasiones también tiene formato banda de cinco, «para cando se precisa facer máis ruído»: bajista, batería, pianista y ellos dos. Dependiendo del lugar y de lo que se pida, uno u otro formato, cada uno con sus pros y sus contras. «Co dúo soamos máis en acústico. Con el chegas a máis sitios, coa banda é máis custoso, tamén economicamente para quen contrata», reflexiona una Huguette que, curiosamente, heredó afición musical de sus progenitores.

ANA GARCIA

«Meu pai tocaba a harmónica e eu tócoa grazas a el. Bueno, tócoa, sóproa, doulle bicos, como di O Mighelo», ríe. Su madre perteneció al coro Aires de Bergantiños: «Canta ben, pero prodígase menos. Meu pai era máis artista, de cantar e tocar nas tabernas, de aí me vén», evoca. Habla de él en pasado porque Manuel Periscal, Lecho, falleció hace menos de dos meses, el pasado 5 de diciembre: «Ben que se bota de menos, aí estamos, tratando de superar este bache». A él, fiel seguidor de Quercus, le dedicaron la entrevista este pasado viernes.

Quercus es roble, carballo. Blues es eso, blues. Y Quercus Blues pues algo muy suyo, de Huguette y de Andrés, blues #madeinCarballo, un claro guiño: «Non facemos blues, blues, blues, collemos cousiñas, porque nos encanta aos dous, pero o noso é un blues-soul-pop-rock», matiza. Fue en el 2017, en el tiempo de «micros abertos» del Casino, cuando la agrupación se creó oficialmente, y desde entonces ya ha habido un «fillo musical»: InsomMIblues. «O meu insomnio, son unha muller con problemas para durmir. Aproveito ese tempo, miro para o teito buscando solucións», ríe.

En sus letras, el castellano y también el gallego, con piezas tan especiales entre estas últimas como Limiar, basado en un poema de Celso Emilio Ferreiro. Otra, Aló, inspirada en el poema Ó que ben quixo un día, de Rosalía de Castro, que musican en formato bossa nova. Del primero preparan videoclip, tirando por un formato audiovisual que, en los tiempos que corren y con las formas de consumo actuales, permiten llegar a más gente: «Os cedés xa case pasan a ser artículo de luxo». Aun así, avanza que después de InsomMIblues habrá más pronto que tarde un nuevo EP, para el que ya tienen cinco temas en cartera: «Iremos gravar nos vindeiros meses, desta vez si que faremos vinilo, e unha presentación oficial...». Quercus, que ya pasó por festivales como el Orballo Cultural, el Rockin o el Derrubando muros versión estival, está abierto a contrataciones: no tienen más que bucear en su perfil de Facebook.

Doctora en Coristanco

Huguette y Andrés se conocieron en un grupo folk de Carballo, Marea Baixa. Es de esa época que recuperan Limiar, «pero dándolle o noso toque». Ella en la voz, él en la guitarra. Todavía se recuerda de niña en el coro de la iglesia: «Aí foi onde nacín [como vocalista]». Integró Marea Baixa hasta su disolución. Le cuadró con sus estudios de medicina en Santiago, así que se pasó hasta acabar la carrera al coro universitario, con Margarita Guerra como directora.

Huguette y Andrés Rey, en un concierto en el parador de Muxía
Huguette y Andrés Rey, en un concierto en el parador de Muxía BASILIO BELLO

El mir y la formación como médico de familia en Asturias trajeron para Huguette un parón a nivel artístico, como lo hizo también la carrera de arquitectura para Andrés. «Logo casamos, empezamos a nosa vida laboral, centrámonos nela e, unha vez encamiñada, pois empezamos outra vez co tema musical», recuerda. Siguió formación en la Escola da Rúa y así fue avanzando el tiempo. Aunque ahora temporalmente de baja, Periscal desempaña su profesión como doctora en el centro de salud de Coristanco, a donde llegó en el 2021: está «encantada». Antes había estado en Tordoia. «Son dúas vidas moi ben separadas, non se mesturan O da música é para relaxarse».