Aunque la virgen sea blanca píntame angelitos negros. Que también se van al cielo todos los negritos buenos. Pintor, si pintas con amor, por qué desprecias su color. Si sabes que en el cielo también los quiere Dios.
Con estas estrofas de la canción Angelitos Negros del cantante cubano-español Antonio Machín pretendo contestar a una reflexión que leí en redes sociales el segundo día que se celebró en Cee la misa del encuentro jubilar mariano con jóvenes de Córdoba y Valencia. En ella se criticaba que en el acto religioso cantase un coro africano, con ritmos del continente pobre, y en francés, en vez de hacerlo coros o solistas gallegos.
Lo entendí como una crítica a la decisión del párroco ceense, don Desire Kouakou, de eliminar un monopolio musical en los actos litúrgicos de las múltiples parroquias que administra y dar cabida a otros coros y solistas comarcales, y por lo tanto generalmente gallegos.
Conocí a Desire recién elegido alcalde Cee. En aquel momento él solo era el párroco de Ameixenda, Brens y Buxantes. Venía a plantearme temas relacionados con Brens y con su obra social Egueire. Me pareció un hombre inteligente, afable y luchador. No salió muy satisfecho de la entrevista porque en aquel momento no pude asumir sus peticiones. Más adelante, cuando sustituyó en la parroquia de Cee al recordado don Manuel, empecé a tener una relación más frecuente con él, entre otras cosas porque pasó a formar parte del patronato de la Fundación Fernando Blanco de Lema, que yo presidía.
En la actualidad dirige una unidad pastoral que por extensión parece más una diócesis, Cee, Corcubión, Ameixenda, Brens, Toba y Buxantes, con gran acierto y logros impensables como juntar a todas las parroquias para la celebración de algunos actos litúrgicos y festivos. Estudió teología en Comillas, el Harvard católico. Comprometido con su pueblo, Costa de Marfil, fundó una ONG para fomentar la formación y el trabajo productivo de su gente. Se mueve por el palacio arzobispal de Santiago como Pedro por su casa, pues allí reconocen, y mucho, su valía y capacidad de trabajo. A él debemos la concesión de Roma del año jubilar mariano y la posterior coronación de la Virgen da Xunqueira en mayo del 2023.
Los tres pequeños frentes que tiene abiertos se disiparan con el tiempo, que es una gran medicina. El que se creía ungido para ocupar el puesto de don Manuel encontrará nuevos espacios pastorales, y lo hará bien, porque tiene capacidades y valores para ello. El equipo auxiliar que lo apoya colaborarán a despejar el camino, con Iván al frente como coordinador de sacristanes, una vez cicatrizadas las heridas provocadas por la remodelación de equipos. Y los músicos afligidos tendrán sus oportunidades porque profesionalidad les sobra. A Desire Kouakou, recordarle unas palabras suyas del año 2020: «No se puede entrar en la colapsología sino en la esperanza».
Enhorabuena por el éxito religioso, social y promocional de Cee y de la Costa da Morte.
*Ramón Vigo es portavoz del grupo municipal IxCee, además de exalcalde de este municipio.