
El delegado del Gobierno, Pedro Blanco, participó en el acto de inauguración de esta nueva infraestructura
07 may 2025 . Actualizado a las 05:00 h.El Concello de Cerceda sigue avanzando en su estrategia municipal en materia de movilidad sostenible y viene de terminar una nueva senda peatonal y ciclista que conecta los núcleos de Ribasoutas y Xermar a lo largo de la carretera AC-400. La infraestructura se inauguró ayer en un acto institucional en el que participaron el alcalde, Juan Manuel Rodríguez, y el delegado del Gobierno en Galicia, Pedro Blanco.
La actuación, pensada para mejorar la seguridad viaria y para fomentar los desplazamientos sostenibles en el municipio, costó 754.000 euros y fue financiada al 80 % con una ayuda del IDAE. Se trata, informan del Concello, «da actuación máis importante en materia de mobilidade peonil acometida neste mandato, tanto pola súa envergadura como polo seu impacto directo na calidade de vida dos habitantes da zona».
El itinerario tiene 1.835 metros de longitud y dos metros de ancho e incluye una pasarela peatonal pilotada de 595 metros con una barandilla de madera. La actuación se completó con una red de recogida de pluviales y con la construcción de un muro de piedra de granito de 307 metros.
El alcalde explicó que esta senda conecta con la que ya se ejecutó en su día en San Vicenzo y con otra en Ribasoutas, y también indicó que se trata de la sexta que hace el Concello con la financiación del IDAE. El delegado del Gobierno, por su parte, subrayó que Cerceda es «un deses concellos que están a aproveitar de mellor maneira os fondos do plan de recuperación».