La costa de Fisterra a mil metros de altitud

Santiago Garrido Rial
s. g. rial CARBALLO / LA VOZ

FISTERRA

Santi Garrido

Los aviones de AFN vuelan de manera regular por esta zona, disfrutando de uno de los mejores paisajes de Galicia

11 oct 2019 . Actualizado a las 16:52 h.

La costa de la comarca de Fisterra y todo su entorno, por el litoral de Carnota y el interior de Mazaricos, es una de más espectaculares de Galicia ya en tierra, sensación que desde el aire, sobre todo a poca altitud, se multiplica. Este privilegio sensorial está reservado de manera habitual para los alumnos e instructores de Aeroflota del Noroeste (AFN), la escuela de pilotos son sede en Alvedro y aulas y simuladores en Carral que lleva 23 años formando a aviadores, muchos de ellos procedentes precisamente de la Costa da Morte.

Esta es una de las zonas de la provincia preferidas para los entrenamientos. Pero es que, además, en Mazaricos, junto al embalse de Fervenza (al otro lado de la cabecera, con una pista que lo conecta con Dumbría) está el aeródromo de Naturmaz, cuyo responsable, Juan Blanco, alcalde de Mazaricos, es un exalumno de AFN. Tiene una pista de 700 metros y su relación con la escuela y esta, en el futuro, podría operar algunos vuelos desde ella. Es algo que está en estudio, explica David Fernández, director de AFN. Le gusta esta pista, sus características y el entorno. «Enseña mucho», asegura. Los alumnos están acostumbrados a una pista asfaltada y grande en Alvedro, y en la Fervenza se sienten los aviones de una manera más elemental. Fue precisamente desde ella donde se realizó el miércoles un vuelo a poco más de 1.100 metros de altitud al que corresponden estas imágenes.

El mejor observatorio de la Costa da Morte

Los siete aviones de la flota de AFN (dos bimotores, dos monomotores avanzados, y tres monomotores básicos) realizan centenares de vuelos al año sobre la Costa da Morte. Toda: de A Laracha a Fisterra, de Mazaricos o Carnota a Malpica, de Cerceda a Muxía. Son, aunque no trascienda, el mejor observatorio diario de la zona, que solo detectan aquellos que escrutan el cielo cuando escuchan un zumbido sobre sus cabezas, pero que realmente suelen pasar inadvertidos. Ya no es solo que peinen la comarca con regularidad, es que muchos de sus alumnos son o han sido de la zona.

Es evidente que hay muchos otros del resto de Galicia y también de España (sobre todo del noroeste), pero sorprende la elevada presencia histórica (la escuela tiene ya 23 años, con licencia válida para toda la UE, y muchos otros países la convalidan) de Bergantiños, Soneira, Fisterra o Barbanza en relación a su territorio.

David Fernández, coruñés con residencia en Cerceda, vinculado familiarmente a Zas, destaca siempre las cualidades de la Costa da Morte para volar y aprender a volar, y no escatima elogios para el aeródromo de Fervenza, que conoce bien. Sus principales operaciones son de ultraligeros, pero los monomotores de la escuela pueden despegar y aterrizar sin problemas de su pista, al lado del agua, y en el futuro podría haber una relación formativa muy estrecha.