
















La Virxe aguarda ya en el santuario de Caión y a Muxía no dejan de llegar romeros
04 sep 2017 . Actualizado a las 08:16 h.Septiembre es, por excelencia, el mes de las romerías marianas en la Costa da Morte, y dos de las más importantes son la de Os Milagres de Caión (el 8 es la jornada central) y la de A Barca de Muxía (9, 10 y 11). Precisamente en la localidad larachesa se vivió ayer un día grande, con la subida en procesión de la imagen hasta el santuario, donde permanecerá hasta el próximo domingo. Una multitud, para algunos incluso más que otros años, siguió el recorrido, evidenciando que estas romerías, con sus consiguientes peregrinaciones, y por más que cambien los tiempos, mantienen el poder de convocatoria. Pasan de una generación a otra y los jóvenes siguen echándose al camino para cubrir a pie distancias de kilómetros, a veces por un espíritu de reunión y, otras, con ofrendas bien particulares, como la que llevó ayer a Caión a Daniel Aldao y Tania Rama. Centenares de personas integraron la lengua de romeros desde la iglesia parroquial. Hoy, mañana, miércoles y jueves, habrá oficios religiosos en el santuario de 10.00 a 12.00 y de 17.00 a 20.00.

A Muxía, donde la novena de la Virxe da Barca empezó el pasado jueves, no dejan de llegar tampoco gentes de toda la comarca que cubren el trayecto hasta el santuario. Estas jornadas previas al fin de semana de la romería son las más intensas, y son las que eligen también los integrantes del grupo Peta Forte de A Pereiriña desde hace unos cinco o seis años. No faltaron a la cita este septiembre y caminaron hasta Muxía el sábado. «Tamén foi por estas datas cando se formou o grupo», dice Pepe Quintáns. Pasaron ya once años. En torno a medio centenar de personas, de muy diversas edades -entre 11 y 72-, tomaron parte en la peregrinación. En Morpeguite hicieron un alto para la comida y, entrando en Muxía, tomaron sus gaitas para subir tocando hasta el santuario: «Sen problema. A gaita tócase como sexa», dice Quintáns, haciendo hincapié en que tan importante es para la tradición la gente mayor como la cantera. La asociación de vecinos de A Pereiriña también forma parte de la organización.