El cura de Pazos: «A miña idea non era derrubar a reitoral, senón endereitar unha parede que daba á vía»

Antonio Longueira Vidal
Toni Longueira CARBALLO / LA VOZ

PONTECESO

ANA GARCÍA

El alcalde de Ponteceso, José Manuel Mato, y el cura de Pazos, Manuel García, confirmaron que no se tramitó permiso alguno para derribar el inmueble

10 dic 2023 . Actualizado a las 05:00 h.

La demolición de la antigua rectoral de Pazos, Ponteceso, pilló a todo el mundo con el pie cambiado. Sobre todo en el Concello, donde la sorpresa fue mayúscula. El alcalde, José Manuel Mato, señaló que piensa hablar mañana con el párroco, Manuel García, para abordar esta cuestión. Lo que sí confirmó el regidor es que en el consistorio no consta permiso alguno para actuar sobre la antigua rectoral y menos para proceder a su derribo: «Non temos nada ao respecto», se limitó a decir el mandatario, quien solicitó prudencia a la espera de tratar el tema con el sacerdote.

El propio párroco, Manuel García, también confirmó que no se había tramitado ninguna licencia previa, ni a petición propia ni tampoco del Arzobispado. Sí insistió en que se trataba de una actuación «urxente» dado el peligro que suponía la maltrecha estructura para viandantes y vehículos: «Levaba [la rectoral] trinta anos en picado. Xa caera unha parede lateral, a do lado dereito, en verán, e xusto despois abriuse unha greta na parede frontal, que dá cara a vía pública. Se fose para o interior da finca non pasaba nada, pero neste caso daba á vía pública. O xoves a greta chegaba ao solo». No se tramitó ningún tipo de licencia, pero se llamó a un palista: «Foi unha actuación urxente para evitar o derrubamento cara a vía. Non había intención de tirala, a intención era empuxar [con la pala] a parte alta da parede para que non se viñera cara a estrada, polo risco de que puidera ocasionar danos ás persoas e aos vehículos. Foi empuxar esa parede frontal para dentro e xa caeu a lateral do lado esquerdo. A de atrás, sen ese apoio, caeu cara diante. Ao final houbo que tirar todo», dijo.

También se vio afectado un elemento decorativo de interés, un pináculo del atrio: «Na entrada da igrexa había un pináculo en cada lateral. Un dos pedruscos bateu sobre un dos pináculos. Xa pasou en verán coa parede lateral dereita, que caeu do lado do adro e danou un muro da igrexa. Nun ano que levo de cura en Pazos á reitoral xa lle puxen en dúas ocasións cinchas para evitar que o muro se viñera abaixo».

En el PSOE y en el BNG criticaron esta inesperada actuación. La portavoz nacionalista, Fátima Rodríguez, dijo sobre este derribo: «Non nos gustan as políticas de feitos consumados».

«Mandei ao Arcebispado ata tres informes sobre o estado da reitoral de Pazos» 

El párroco de Pazos también aclaró que antes de la contratación de la pala retroexcavadora para, supuestamente, enderezar una de las paredes de la antigua rectoral, había enviado escritos al Arzobispado para tratar de salvar el inmueble: «Mandei ata tres informes advertindo do mal estado da reitoral». También anunció que enviará sendos informes, tanto a la Iglesia como al Concello de Ponteceso, explicando lo acontecido este jueves.

Sobre el futuro que le aguarda al terreno, Manuel García apuntó que es una decisión del Arzobispado. También dijo que si por él fuera destinaría la parcela «duns 16 ferrados» a uso parroquial, priorizando «o interese veciñal» como un local social o una instalación similar. El exalcalde Lois García Carballido recordó que en su día hubo conversaciones con el Arzobispado para acometer un aparcamiento público, pero que, finalmente, no se llegó a concretar.