Jerry Afriyie culminó con una vaselina el partido práctico y eficaz de los lucenses, que necesitarán ganar en Amorebieta para no dejar su permanencia en manos de terceros
17 may 2025 . Actualizado a las 23:12 h.Solo dos días después de trascender que el Consejo Superior de Deportes había autorizado la venta de un 75 % de la acciones de Tino Saqués, el actual presidente, a un grupo de inversión mexicano —falta la confirmación de los compradores—, el Club Deportivo Lugo exponía tres puntos de extrema relevancia en su futuro. Se la jugaba ante un Zamora que está a la procura de un billete para la próxima entrega de la Copa del Rey y soñando con sellar otro aún más ilusionante, el de la promoción de ascenso a Segunda División. En el bando local, el objetivo era encarar la última jornada sin depender de ayudas y fallos de terceros.
Saltaron con brío los dos equipos, buscando con celeridad el marco contrario y ganas desatadas de recuperar cuando antes el balón para esgrimir sus armas. Eran más hábiles con el esférico en los pies los visitantes, pero fueron los anfitriones los que dispusieron de las ocasiones más serias para adelantarse en el marcador. Jorge González, solo en el corazón del área, desperdició un preciso servicio de Raúl Hernández, y poco después fue este último quien asustó a la numerosa parroquia zamorana en el estadio con un zurdazo rechazado por Fermín. El Lugo lo intentaba sobre todo con balones al espacio para que Jerry Afriyie hiciera el resto, y con transiciones que no prosperaban; el Zamora, cargando el juego sobre la banda que trataban de explotar Rufino, Kike Márquez y el exalbivrmello Campabadal. Con un fútbol plano y exento de patrón por parte de unos y otros, la emoción era lo que mantenía despiertos a los aficionados. A falta de ideas, la estrategia se antojaba como un buen recurso, y así e adelantaría el Lugo. Una falta botada por Roger Martínez cerca del vértice derecho del área la peinó Kike Márquez, Fermín hizo la estatua y el balón se coló en la portería tras pegar en el poste. Gol por sorpresa y apoteosis en el Ángel Carro porque los de Álex Ortiz daban una buena zancada hacia la permanencia.
Sabas movió ficha en el descanso y Ortiz apostó por los mismos. Cuando tan solo habían transcurrido algo más de tres minutos volvería a explotar de júbilo el Ángel Carro porque el árbitro sancionó el agarrón de Campabadal a Pedro Pereira en un saque de esquina. Con Bryan Mendoza en el banquillo, fue Raúl Hernández quien asumió la responsabilidad. Fermín adivinó sus intenciones, metió la manopla para desviar el disparo y el poste escupió el balón.
Conforme avanzaba el partido, el cansancio hacía cada vez más mella. El Lugo priorizaba sus esfuerzos en proteger su valioso botín y volvería a encontrarse con un tanto completamente imprevisible. Raúl Hernández se encontró el balón en campo propio, intuyó el desmarque de Jerry Afriyie y el ghanés culminó el zarpazo con una exquisita vaselina. El broche a un partido serio, práctico y eficaz de los rojiblancos, y la puntilla para un Zamora que no dejó de intentarlo, pero muy justo de ideas y energía y que poco exigiría a Marcos Lavín en el tramo final del encuentro.
LUGO: Marcos Lavín, Lizancos, Juan Rodríguez, Pedro Pereira (Bernardo, min 83), Zoilo, Yayo González, Alberto Vaquero (Dani Vidal, min 56), Roger Martínez, Jorge González (Bryan Mendoza, min 65), Raúl Hernández (Marcos Sánchez, min 84) y Jerry Afriyie
ZAMORA: Fermín, Campabadal, Adrián Bolo, José Carlos, Sergio Nieto (Álvaro Romero, min 82), Carlos Ramos (Frimpong, min 46), Guille Macho (Dani Hernández, min 82), Rufino (Joel Priego, min 46), Kike Márquez, Tresaco (Pito Camacho, min 67) y Roni
GOLES: 1-0, min 38: Kike Márquez, en propia meta. 2-0, min 79: Jerry Afriyie.
ÁRBITRO: Montes García-Navas, del comité madrileño. Expulsó por doble amonestación al jugador albivermello Bryan Mendoza (min 86). Amonestó a los locales Jerry Afriyie, Yayo González, Roger Martínez y Pedro Pereira, y al visitante Kike Márquez.
INCIDENCIAS: Unos 3.5000 aficionados en el Ángel Carro.
Ganar en Amorebieta, la única garantía de éxito
Hubo un momento a lo largo de la jornada, disputada íntegramente en la tarde de ayer a partir de la misma hora en todos los campos, que al Lugo le bastaba con sumar un punto en el último partido para seguir compitiendo en Primera Federación la próxima temporada. Pero los marcadores sufrieron variaciones y finalmente necesitará la victoria para no confiar su futuro a los tropiezos de otros equipos también en peligro de descenso.
El Lugo, que había iniciado la jornada en el pozo de la clasificación, brincó hasta la decimotercera plaza con la trabajada victoria frente al Zamora. Ahora acumula 46 puntos. Por delante tiene al Arenteiro (48) y el Barakaldo (49). Por detrás, al Unionistas (46) y el Sestao River (45); y ya en puestos de descenso, al Osasuna Promesas (45), el Real Unión (44), el Barcelona Atlètic (42), la Gimnástica Segoviana (41) y el Amorebieta (38).
Si los albivermellos solo pueden empatar o pierden en el campo del Amorebieta, se podrían ver superados por el Sestao River, el Unionistas y el Osasuna Promesas, por lo que estará obligado a ganar para evitar depender de terceros.
La jornada final volverá a disputarse en horario unificado el próximo sábado y ofrece estos encuentros: Bilbao Athletic-Real Unión, Amorebieta-Lugo, Osasuna Promesas-Ourense CF, Barcelona Atlètic-Unionistas, Nàstic-Arenteiro, Real Sociedad B-Celta Fortuna, Sestao-Ponferradina, Tarazona-Barakaldo, Leonesa-Andorra, Zamora-Gimnástica Segoviana.